La Universidad de Columbia expulsó o suspendió a algunos estudiantes que participaron en la ocupación de un edificio del campus durante las protestas propalestinas en 2024 y revocó temporalmente los diplomas de otros graduados, informaron las autoridades el jueves. Una junta judicial impuso diversas sanciones contra los estudiantes que ocuparon Hamilton Hall la primavera pasada para protestar contra la guerra en Gaza.
Sanciones a estudiantes por la ocupación de Hamilton Hall
Columbia informó en un correo electrónico dirigido a toda la comunidad universitaria que una junta judicial impuso diversas sanciones contra los estudiantes involucrados en la ocupación de Hamilton Hall. Sin embargo, la universidad no detalló cuántos fueron expulsados, suspendidos o cuyos títulos fueron revocados, pero señaló que las decisiones se tomaron con base en una “evaluación de la gravedad de las conductas”.
Este proceso de investigación, que se extendió por varios meses, culmina en un momento en que la universidad enfrenta las repercusiones del arresto de Mahmoud Khalil, un conocido activista palestino en el campus. Khalil fue detenido por las autoridades federales de inmigración el sábado pasado, en lo que el presidente Donald Trump calificó como la “primera de muchas” detenciones similares.

Impacto de las protestas propalestinas en Columbia
Simultáneamente, la administración Trump ha retirado más de 400 millones de dólares en fondos federales a la universidad, argumentando que esta ha fallado en la lucha contra el antisemitismo en el campus. Legisladores republicanos han señalado la falta de sanciones inmediatas contra los estudiantes que tomaron Hamilton Hall como una muestra de inacción por parte de Columbia.
La ocupación del edificio se produjo luego de que un campamento de tiendas de campaña en el campus inspirara una serie de manifestaciones similares en universidades de todo el país. El 30 de abril de 2024, un grupo reducido de estudiantes y sus aliados se atrincheraron dentro de Hamilton Hall utilizando muebles y candados, marcando una escalada significativa en las protestas dentro del campus.
Respuesta de las autoridades y consecuencias disciplinarias
A petición de las autoridades universitarias, cientos de policías de Nueva York ingresaron al campus la noche siguiente, arrestando a decenas de personas involucradas tanto en la ocupación como en el campamento de protesta.
En junio, durante una audiencia judicial, la fiscalía del distrito de Manhattan anunció que no presentaría cargos penales contra 31 de las 46 personas arrestadas inicialmente por allanamiento del edificio administrativo. Sin embargo, los estudiantes aún enfrentaban procedimientos disciplinarios internos, incluyendo audiencias que podrían resultar en su expulsión.
Las sanciones finales anunciadas esta semana son el resultado de un proceso prolongado, que incluyó audiencias individuales para cada estudiante implicado. Estas audiencias fueron dirigidas por la Junta Judicial de Columbia, una institución con una larga trayectoria en la administración de la justicia universitaria.
Críticas a nuevas medidas disciplinarias
Además de las expulsiones y suspensiones anunciadas, una junta disciplinaria recientemente creada ha iniciado procedimientos contra otros estudiantes, incluidos aquellos que han expresado críticas a Israel. Esto ha generado preocupación entre defensores de la libertad de expresión, quienes advierten sobre posibles represalias políticas dentro del campus. Khalil, por ejemplo, no estaba entre los manifestantes acusados de ocupar Hamilton Hall, pero su arresto ha intensificado el debate en torno a la situación de los activistas estudiantiles.
El anuncio de la expulsión de los estudiantes ha sido recibido con opiniones divididas. Algunos profesores, como Gil Zussman, director del departamento de ingeniería eléctrica y miembro del Grupo de Trabajo sobre Antisemitismo de Columbia, han respaldado la medida.
“Demostrar finalmente que incumplir las normas universitarias tiene consecuencias es un primer paso importante para retomar las misiones fundamentales de la investigación y la docencia”, afirmó Zussman en una publicación en la plataforma social X.
Las protestas propalestinas en Columbia han sido parte de un movimiento más amplio de manifestaciones estudiantiles en Estados Unidos, reflejando la creciente tensión en los campus universitarios en torno al conflicto en Gaza.