Noruega dijo el jueves que seguiría endureciendo sus restricciones a la entrada de personas desde Rusia, y advirtió que los que tengan visas de turista emitidas por Noruega antes de que se estrecharan los controles en 2022, o bien emitidas por otro país europeo, no podrían entrar en el país escandinavo a partir de la semana que viene.
La medida responde a la “guerra ilegal de agresión de Rusia contra Ucrania”, afirmó la ministra de Justicia, Emilie Enger Mehl.
Noruega tiene una frontera de 198 kilómetros (123 millas) con Rusia en el Ártico.
El Aftenposten, un importante diario noruego, indicó la semana pasada que la agencia de seguridad interna noruega, conocida por el acrónimo PST, estaba preocupada porque rusos implicados en espionaje estuvieran entrando por el único paso fronterizo, en Storskog, cerca de la localidad de Kirkenes.
“Ahora Rusia se ve beneficiada por realizar sabotajes en países europeos para debilitar las capacidades de defensa ucranianas”, dijo el miércoles Inger Haugland, responsable de contraespionaje del PST. No dio más detalles.
El PST actualizó el miércoles su evaluación general de seguridad y dijo que “parece” que la amenaza de sabotaje ha subido contra las compañías noruegas que producen armamento destinado a Ucrania.
Enger Mehl señaló que se harían excepciones a las nuevas restricciones de entrada, por ejemplo para personas que visitaran a parientes cercanos en Noruega o para rusos que estudian o trabajan en Noruega. Las personas que viven junto a la frontera tienen certificados de residente fronterizo. Se negará la entrada a otros ciudadanos rusos que tengan previsto entrar en Noruega para turismo u “otros propósitos no esenciales”, añadió. La prohibición entraba en vigencia el próximo miércoles.
“Por supuesto, estas decisiones no pueden quedar sin respuesta”, dijo el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov. “La decisión es puramente discriminatoria”.
Aunque Noruega no es miembro de la Unión Europea, forma parte del espacio de libre circulación conocido como Zona Schengen, que permite a más de 400 millones de europeos y visitantes moverse por la región sin mostrar sus documentos de viaje en las fronteras internas.
El gobierno noruego dejó de dar visas de turistas a ciudadanos rusos hace dos años. En septiembre prohibió a entrada de autos de pasajeros registrados en Rusia, un reflejo de las sanciones de la UE contra Moscú por su guerra en Ucrania.