La localidad montañosa suiza de Brienz está otra vez amenazada por un enorme corrimiento de tierras. Por ese motivo, se prepara para ser evacuada. No se descarta que hasta 1,2 millones de metros cúbicos de escombros de roca puedan descender por el valle y llegar a la localidad.
Los aproximadamente 90 residentes de Brienz han sido informados de que podrían tener que abandonar sus hogares en los próximos días días y, en el peor de los casos, es posible que no puedan regresar hasta pasados varios meses.
También en 2023
El desprendimiento de rocas avanza actualmente a un ritmo de unos 25 centímetros al día. Los desprendimientos de rocas en la zona del derrumbe podrían aumentar la velocidad a 80 kilómetros por hora o más, según informó el geólogo Stefan Schneider a los residentes en un acto informativo. Si se produjera un deslave repentino, ya no sería posible advertir a tiempo a la población.
Ya en mayo de 2023, el pueblo fue evacuado en previsión de un corrimiento de tierras. En junio de 2023, un enorme torrente de escombro rodó montaña abajo. Los escombros y los cascotes sepultaron prados y una carretera.