Elon Musk, multimillonario y actual responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) bajo la administración de Donald Trump, ha revelado que el presidente estaría dispuesto a cerrar la Agencia de Ayuda al Desarrollo Internacional (USAID). Según el medio estadounidense Axios, Musk y Trump discutieron detalladamente la situación de la agencia, con Musk expresando que, tras una revisión exhaustiva de sus problemas, el presidente aceptó la propuesta de cerrarla.
En un debate realizado en la madrugada del lunes 3 de febrero de 2025 en X Spaces, Musk explicó que no solo había hablado del tema con Trump, sino que le había preguntado varias veces si realmente quería proceder con el cierre de USAID. «La agencia no tiene solución», declaró Musk en la transmisión en vivo, y continuó afirmando que «es simplemente una bola de gusanos» que necesita ser eliminada.
Tensiones internas en USAID y el acceso a información clasificada
La propuesta de Musk llega en un contexto tenso dentro de USAID, luego de que el Gobierno de Trump pusiera en licencia a dos altos jefes de seguridad de la agencia, quienes se negaron a entregar material clasificado a los equipos de inspección de DOGE, según informaron fuentes cercanas al caso. Este incidente ocurrió después de que el equipo de Musk lograra acceder a documentos clasificados que incluían informes de inteligencia, pese a no tener las autorizaciones de seguridad necesarias.
El exfuncionario de USAID que habló con The Associated Press (AP) explicó que los dos empleados de seguridad, John Voorhees y Brian McGill, actuaron en cumplimiento de sus obligaciones legales al negarse a entregar la información sin las credenciales apropiadas. Sin embargo, el equipo de DOGE de Musk finalmente obtuvo acceso a los datos el sábado 1 de febrero de 2025.
Congelación de fondos y la crítica a USAID
La propuesta de cierre de USAID también está vinculada a la decisión de Trump de congelar casi todos los fondos destinados a los programas de ayuda exterior de la agencia. USAID, que tenía un presupuesto superior a los 60.000 millones de dólares durante la presidencia de Joe Biden, fue objeto de esta congelación durante 90 días. Sin embargo, se exceptuaron los fondos destinados a Israel y Egipto. Durante 2023, USAID distribuyó ayudas a 180 países, siendo Ucrania el mayor receptor con más de 17.000 millones de dólares en ayuda.
Este recorte a los fondos de ayuda refleja el enfoque más restrictivo de la administración Trump hacia la cooperación internacional. Aunque USAID continúa siendo un actor clave en la distribución de ayuda humanitaria global, la presión sobre la agencia aumenta con cada paso hacia la reducción de sus operaciones. Representantes de DOGE, liderados por Musk, visitaron la sede de USAID en Washington, donde accedieron a información confidencial sobre ciudadanos estadounidenses, lo que levantó preocupaciones sobre la transparencia y seguridad en el manejo de los datos.
Musk critica a USAID y la intervención de Trump
Musk no ha dudado en calificar a USAID como una «organización criminal» en sus redes sociales, agregando que es «el momento de que muera». En una publicación de X (antes conocido como Twitter), Musk reiteró que la agencia, creada en 1961 y con más de 10.000 empleados, estaba dirigida por «lunáticos radicales», una crítica que fue respaldada por Trump, quien también apuntó que la agencia no cumplía con sus expectativas.
Reacciones políticas y la congelación de la ayuda internacional
El enfoque de Trump y Musk sobre USAID no ha pasado desapercibido para la oposición política. La senadora demócrata Elizabeth Warren denunció públicamente que la administración de Trump estaba permitiendo que Musk accediera a información confidencial de los ciudadanos y bloqueando la financiación de la ayuda internacional. En una publicación, Warren subrayó que este tipo de medidas podrían generar daños irreparables a la política exterior de Estados Unidos.
Además, en respuesta a la visita de los miembros de DOGE a USAID, demócratas del Senado enviaron una carta al secretario de Estado, Marco Rubio, exigiendo respuestas sobre el acceso sin autorización de seguridad a materiales clasificados, un incidente que ha generado una creciente preocupación entre los funcionarios de la oposición.
El cierre de USAID y sus implicaciones globales
El posible cierre de USAID plantea serias implicaciones para la asistencia humanitaria global. Estados Unidos es el mayor donante de ayuda humanitaria del mundo, y una interrupción de sus operaciones podría tener un impacto devastador en los países que dependen de este tipo de ayuda. La organización provee asistencia a millones de personas en todo el mundo, en áreas como la salud, la educación, la infraestructura y la ayuda en tiempos de desastre.
La propuesta de Trump y Musk de eliminar esta agencia refleja una visión más aislacionista y reduccionista de la política exterior estadounidense. De seguir adelante con esta medida, Estados Unidos podría perder su influencia en varias regiones del mundo, especialmente en África, Asia y América Latina, donde sus programas de ayuda son vitales para el desarrollo y estabilidad.
La cancelación de la web de USAID y otros pasos administrativos
El clima de tensión sobre USAID también se ha visto reflejado en el cierre de su página web y sus cuentas en redes sociales. Además, la administración Trump ha implementado una serie de medidas que han resultado en la suspensión de muchos programas de asistencia exterior, lo que ha causado una reducción significativa en la capacidad operativa de organizaciones de ayuda internacional que dependen de los fondos de USAID.
El 2 de febrero de 2025, DOGE también llevó a cabo una operación similar en el Departamento del Tesoro, accediendo a información confidencial sobre los sistemas de pago de clientes de la Seguridad Social y Medicare. Este acceso a información sensible ha generado un fuerte rechazo entre los opositores de Trump y Musk, quienes denuncian la falta de controles de seguridad y el abuso de poder por parte de la administración.
Conclusión sobre el cierre de USAID y sus repercusiones
El posible cierre de USAID es solo una de las medidas que podrían redefinir la política exterior de Estados Unidos bajo la administración Trump. Si se lleva a cabo, esta acción no solo afectaría a los países que dependen de la ayuda estadounidense, sino que también podría tener consecuencias a largo plazo para la imagen de Estados Unidos en el ámbito internacional. A medida que la administración Trump avanza con sus planes, la comunidad internacional observa de cerca el futuro de la ayuda humanitaria global.