Un avistamiento extraordinario ocurrió en las aguas frente a la costa de la Bahía de Monterey, California, cuando más de 2,000 delfines fueron observados a unos 18 kilómetros del puerto. Este evento, que atrajo la atención de oceanógrafos y biólogos marinos, incluyó la presencia de una especie rara: el delfín septentrional sin aleta dorsal (Lissodelphis borealis). El avistamiento fue capturado en video por Evan Brodsky, capitán y videógrafo de Monterey Bay Whale Watch, quien junto a su equipo se encontraba realizando investigaciones en la zona.
El delfín septentrional sin aleta dorsal es una de las dos especies de delfines que carecen de esta característica física, lo que hace que su presencia en esta área sea aún más inusual. La bahía es conocida por su biodiversidad, pero ver a estos delfines en este tipo de agrupación fue un espectáculo asombroso para todos los presentes.
¿Por qué es especial esta «supermanada» de delfines?
El avistamiento de más de 2,000 delfines no solo fue un evento científico importante, sino que también resultó ser una experiencia emocionalmente impactante para los investigadores y la tripulación presentes. Brodsky comentó que, al principio, el grupo de delfines estaba compuesto por una docena de individuos, pero rápidamente se unieron otros, formando una «supermanada» de miles de delfines. Según Brodsky, la emoción del momento fue tan grande que, incluso, uno de sus compañeros de tripulación derramó lágrimas ante la magnitud del evento.
(Cortesía/Evan Brodsky/Monterey Bay Whale Watch)
Este tipo de agrupación de delfines no es común. Generalmente, los delfines septentrionales sin aleta dorsal suelen formar grupos pequeños, de entre 100 y 200 miembros. Sin embargo, las especies de delfines son conocidas por su naturaleza sociable, y frecuentemente se mezclan con otras especies, como los delfines de Risso. En efecto, Brodsky había registrado previamente una «supermanada» de delfines de Risso utilizando un dron el mes pasado.
El delfín septentrional sin aleta dorsal y su rareza
El delfín septentrional sin aleta dorsal, que puede llegar a medir hasta tres metros de longitud y pesar más de 90 kilogramos, es un animal que habita principalmente en aguas profundas y alejadas de la costa. Por ello, su aparición en la Bahía de Monterey resultó ser un fenómeno altamente inusual, generando un gran interés entre los expertos en vida marina y los visitantes que esperaban la oportunidad de observarlo en su hábitat natural.
(Cortesía/Evan Brodsky/Monterey Bay Whale Watch)
Estos delfines son conocidos por su comportamiento gregario y su disposición a interactuar con otras especies de delfines, lo que los convierte en una especie fascinante tanto para los investigadores como para los entusiastas de la fauna marina. Según Colleen Talty, bióloga marina de Monterey Bay Whale Watch, los delfines suelen formar grupos grandes para defenderse de depredadores, alimentarse de las mismas fuentes o simplemente socializar con otros miembros de su especie.
La biodiversidad de la Bahía de Monterey
La Bahía de Monterey es famosa por su riqueza en biodiversidad marina y por ser uno de los destinos más importantes para la observación de vida marina en California. Este tipo de avistamientos, como la «supermanada» de delfines, refuerza la reputación de la bahía como un punto clave para estudiar y admirar la fauna oceánica. Talty explicó que el avistamiento de estos delfines en tan grandes grupos ofrece a los científicos una oportunidad única para investigar el comportamiento de estas especies y comprender mejor su ecología.