De Wever asume como primer ministro de Bélgica
Este lunes 3 de febrero de 2025, el líder nacionalista flamenco, Bart De Wever, juró como el nuevo primer ministro de Bélgica en una ceremonia oficial frente al monarca, prestando su juramento en las tres lenguas oficiales del país: francés, flamenco y alemán. A pesar de reconocer que convertirse en primer ministro nunca fue su «sueño», De Wever asumió el cargo con determinación, destacando que necesita una década para «sanear» las finanzas del país. «¡Y ahora, a trabajar!», escribió en sus redes sociales poco después de asumir la responsabilidad.
El traspaso de poderes entre De Wever y el primer ministro saliente, Alexander De Croo, se llevó a cabo aproximadamente una hora después de su juramento, permitiendo a De Wever participar en la cumbre informal de líderes de la Unión Europea sobre Defensa, que tiene lugar en Bruselas este lunes.
Cumbre de Defensa de la UE: primer día de De Wever como primer ministro
Tras su nombramiento, De Wever fue recibido por António Costa, presidente del Consejo Europeo, quien le dio la bienvenida y le deseó «éxito» en su nuevo rol, esperando una «sólida cooperación en asuntos de la UE». De Wever, conocido por sus posturas nacionalistas, ahora lidera un Gobierno que se enfrenta a importantes desafíos tanto a nivel nacional como internacional.
La nueva coalición gubernamental belga ha fijado un enfoque claro en la defensa, con el objetivo de incrementar las inversiones en el sector y alcanzar el 2% del PIB para 2029 y el 2,5% para 2034. Este aumento en el presupuesto de defensa también incluye planes para reforzar el ejército, aumentando la plantilla a 29.100 empleados en 2030. Así, la primera reunión del nuevo primer ministro de Bélgica en el ámbito europeo coincide con este ambicioso plan en defensa.
Coalición gubernamental belga «Arizona»: pactos en defensa, migración y reformas
El pacto de Gobierno alcanzado por De Wever y sus aliados en la coalición «Arizona» incluye varios temas clave: además de la inversión en defensa, también se proponen reformas económicas y sociales. Este acuerdo, que se formalizó el 31 de enero de 2025, pone en marcha una serie de políticas destinadas a mejorar las finanzas del país y reducir el gasto público. En el campo de la migración, el pacto incluye medidas que buscan limitar la llegada de demandantes de asilo, así como reducir el número de plazas de acogida. Además, se autorizará el acceso de la policía a los domicilios de aquellas personas que hayan agotado todas las vías de recurso en su solicitud de asilo.
Entre las medidas más destacadas del pacto figuran las reformas fiscales. La creación de un impuesto sobre las ganancias de capital tiene como objetivo acabar con la percepción de Bélgica como un «paraíso fiscal» en cuanto a las plusvalías. Esta medida se considera esencial para corregir el desequilibrio fiscal del país y asegurar una distribución más equitativa de los recursos.
Reformas laborales y de pensiones: la prioridad económica del nuevo Gobierno
El pacto de Gobierno también incluye reformas laborales significativas, tales como la limitación de los pagos por subsidio de desempleo a un máximo de dos años. Además, se implementará una diferencia de 500 euros entre los salarios más bajos y las prestaciones sociales, con el objetivo de fomentar la inserción laboral y reducir el desempleo. En cuanto a las pensiones, las reformas incluyen penalizaciones para aquellos que se jubilen antes de la edad legal de 66 años, aunque se bonificarán las jubilaciones tardías.
La reforma de las pensiones será gradual, con una penalización del 2% hasta 2030, 4% hasta 2040 y 5% a partir de 2040 por cada año de jubilación anticipada respecto a la edad legal, siempre que la persona cumpla con los requisitos de antigüedad laboral. Por otro lado, quienes opten por una jubilación posterior verán un aumento en el monto de su pensión.
Reforma del Estado: un proyecto a largo plazo bajo la dirección de De Wever
Finalmente, el pacto incluye una reforma estructural del Estado que será gestionada directamente por De Wever. Este proyecto tiene como objetivo reestructurar las competencias del Estado para hacerlas más «homogéneas y eficientes». La reforma del Estado es un tema a largo plazo que podría marcar el sello del nuevo gobierno de De Wever, ya que implica una redefinición de la organización política y administrativa de Bélgica.
El nuevo gobierno belga encabezado por Bart De Wever enfrenta un panorama lleno de retos tanto a nivel interno como en su relación con la Unión Europea. Con una agenda que incluye reformas profundas en lo económico, lo social y lo político, el primer ministro belga busca imprimir su sello en una Bélgica que atraviesa un momento de incertidumbre global y de creciente complejidad en la política europea.