Este domingo, unas 160.000 personas, según estimaciones de la policía, participaron en una masiva protesta en Berlín contra el extremismo de derecha y para exigir que todos los partidos políticos se distancien claramente de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD). La manifestación, que tuvo lugar a tres semanas de las elecciones generales del 23 de febrero, surge en un contexto tenso después de que el bloque conservador del candidato a la Cancillería alemana, Friedrich Merz, sacara adelante una propuesta de resolución no vinculante con el apoyo de los ultraderechistas.
Protesta contra el acuerdo entre el bloque conservador y AfD
La protesta en Berlín se produjo tras la votación en el Bundestag (cámara baja) esta semana, en la que el bloque conservador, compuesto por la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merz y su aliado de la Unión Socialcristiana (CSU) de Baviera, aprobó una propuesta para frenar la inmigración irregular, con el apoyo de la AfD. El lema de la manifestación fue «Levantamiento de los decentes. Manifestación por el cortafuegos», un claro mensaje en contra de los acuerdos entre los partidos conservadores y la ultraderecha.
Aunque la policía inicialmente registró unos 60.000 participantes a media tarde, la afluencia creció rápidamente, alcanzando cifras cercanas a las 160.000 personas a lo largo del evento. Los organizadores de la manifestación afirmaron que el número de asistentes llegó a los 250.000, una cifra considerablemente mayor a los 20.000 previstos inicialmente.
Personas en la protesta de Berlín contra el giro político de la derecha. EFE/EPA/Hannibal Hanschke
La manifestación se expandió rápidamente
La Policía de Berlín informó que el número de manifestantes pasó de 2.500 a 20.000 en apenas media hora, y para las 17:30 horas ya había superado las 80.000 personas. La Policía también destacó que el número seguía creciendo, y poco después se estimó que más de 160.000 personas se habían unido a la protesta. Debido al alto número de participantes, las autoridades decidieron cerrar la estación de metro ‘Bundestag’ por precaución, mientras que las fuerzas de seguridad realizaron un seguimiento desde el aire.
Los participantes marcharon hacia la sede de la CDU, la Konrad-Adenauer-Haus, tras un mitin inicial en la pradera frente al Reichstag, edificio emblemático del parlamento alemán. Los organizadores denunciaron el giro hacia la derecha de los partidos conservadores y su acercamiento a la ultraderecha, advirtiendo sobre los peligros de normalizar las políticas de odio.
Reacciones de los organizadores y líderes políticos
Durante el mitin, el publicista Michel Friedman, quien recientemente abandonó la CDU en protesta por el acercamiento a la ultraderecha, recordó a los asistentes el artículo 1 de la Ley Fundamental alemana, que establece que «la dignidad del ser humano es inviolable». En su discurso, también destacó que «el odio no está amparado por la libertad de expresión» y que «el odio es violencia». Además, criticó que la CDU y la CSU votaran junto con la AfD en favor de una política migratoria más estricta.
Friedman calificó el acercamiento a la AfD de «error inexcusable» y afirmó que, aunque la CDU sigue siendo un partido democrático, no debe convertirse en «el partido del odio». Esta postura fue bien recibida por los manifestantes, quienes pidieron un compromiso firme por parte de los partidos para rechazar cualquier tipo de colaboración con la ultraderecha.
Manifestaciones en otras ciudades de Alemania
La protesta en Berlín fue solo una de varias manifestaciones que se celebraron durante el fin de semana en diversas ciudades alemanas. En estas otras concentraciones también se alzaron voces en contra del extremismo de derecha, con miles de personas unidas por el mismo propósito: exigir que los partidos políticos se distancien de la AfD y adopten políticas más inclusivas. Esta ola de protestas refleja el creciente rechazo a las políticas de inmigración restrictivas impulsadas por la ultraderecha.
La policía prevé más protestas en los próximos días
La policía alemana anticipa que las protestas podrían continuar en los próximos días, especialmente en el marco del congreso de la CDU, programado para el lunes en Berlín. Ya se han organizado al menos ocho concentraciones en las cercanías del recinto ferial donde se celebrará el evento, y el número podría aumentar si las tensiones siguen escalando.
El miércoles pasado, la CDU aprobó, con el apoyo de la AfD y los liberales del FDP, una propuesta de resolución no vinculante que busca una «prohibición de facto» de la entrada de migrantes sin documentos válidos. El viernes, la CDU/CSU presentó un proyecto de ley en materia migratoria que no logró obtener la mayoría en el Bundestag, a pesar del apoyo crucial de la AfD. Este borrador de ley planteaba restricciones a la reagrupación familiar para ciertos tipos de refugiados y proponía una ampliación de las competencias de la policía en la aplicación del derecho de residencia.