Joaquin Buckley no defraudó en su primera pelea como estelar en el UFC Fight Night de Tampa, Florida. El estadounidense, que iba a tener delante a Ian Machado Garry, se mostró completamente superior a su rival, Colby Covington, quien no pudo terminar el combate por un brutal corte en el párpado derecho.
‘New Mansa’ acumula una racha de seis victorias consecutivas desde que bajó a las 170 libras.
Joaquín Buckley empujó en el primer asalto con golpes desde distinta guardia y defendió el primer intento de derribo de Covington, quien recibió un corte bajo la ceja derecha que le lastraría todo el combate. ‘Chaos’ intentó conectar con su patada alta, pero ‘New Mansa’ no se dejó sorprender y pudo haber terminado el combate con una larga combinación de golpes a la cabeza. Covington fue salvado por la bocina y salió vivo en esta primera ronda.
Colby Covington salió más activo en este segundo asalto, lanzando derribos nada más comenzar el pleito. Buckley defendió el primero y lo hizo pagar con volumen de golpes. Sin embargo, Covington quedó por encima en el segundo derribo y amarró desde media guardia, pero no logró sacar ventaja de esta posición. ‘New Mansa’ se incorporó y conectó los mejores golpes con jabs y combinaciones de golpes en línea y abiertos.
Joaquín Buckley salió con todo a finalizar con una lluvia de combinaciones de manos y patadas a la cabeza. ‘Chaos’ resistió todo lo que pudo, pero su cara, totalmente ensangrentada, reflejaba el dominio absoluto de ‘New Mansa’. A dos minutos del final, Colby quedó por encima y logró controlar a Joaquin, hasta que el árbitro detuvo el combate para que la doctora revisara el corte en el párpado del de 36 años. Segundos después de la parada, el árbitro detuvo el combate y dio por finalizada la pelea.
Joaquin Buckley venció por TKO (parada médica) a Colby Covington. El estadounidense sigue invicto desde que regresó al peso wélter y se postula como futuro contendiente al cinturón de las 170 libras. Covington suma su segunda derrota consecutiva y se alejan las posibilidades de tener una tercera oportunidad por el título de las 170 libras.