La venta masiva de acciones de Tesla en Wall Street se intensificó este lunes, con las acciones de la fabricante de vehículos eléctricos cayendo un 15%, su peor día en el mercado desde septiembre de 2020.
El peor desempeño de Tesla en semanas
El viernes pasado, Tesla concluyó una séptima semana consecutiva de pérdidas, la racha de caídas más larga desde su debut en el Nasdaq en 2010. Las acciones de la compañía han registrado pérdidas semanales desde que su CEO, Elon Musk, viajó a Washington D.C. para asumir un papel importante en la administración del presidente Donald Trump.
Desde que alcanzaron un máximo de $479.86 el 17 de diciembre, las acciones de Tesla han perdido más del 50% de su valor, lo que ha borrado más de $800 mil millones en capitalización de mercado. Este lunes marcó el séptimo peor día de la acción en la historia de la compañía.
¿Qué está detrás de la caída de Tesla?
La caída de las acciones de Tesla se vio reflejada en un descenso más amplio de los valores en Wall Street, con el Nasdaq cayendo casi un 4%, su mayor descenso desde 2022. La incertidumbre sobre los planes de tarifas del presidente Trump es uno de los principales factores que están afectando a la compañía. Canadá y México son mercados clave para los proveedores de automóviles, y el aumento de las tarifas, junto con la posibilidad de una guerra comercial, afectaría la producción y llevaría a precios más altos.
Además, Tesla enfrenta una erosión de su marca debido a la retórica política incendiaria de Musk y su colaboración estrecha con la administración Trump. Musk, la persona más rica del mundo, ha asumido un papel destacado en el esfuerzo por reducir drásticamente la fuerza laboral, el gasto y las capacidades del gobierno federal, liderando lo que se conoce como el Departamento de Eficiencia Gubernamental.
Logotipo del fabricante de vehículos eléctricos de lujo, en una fotografía de archivo. EFE/Focke Strangmann
Impacto de la retórica política en Tesla
En paralelo, Musk ha utilizado su red social X para lanzar acusaciones contra jueces cuyos fallos no le agradaron y para promover puntos de vista erróneos sobre el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy. Estos comportamientos han generado una reacción negativa, no solo en la esfera política, sino también entre los activistas y seguidores de la marca.
En los últimos meses, activistas y antiguos admiradores de Musk han protestado en diversas instalaciones de Tesla en los EE. UU. Además, las instalaciones y vehículos de Tesla han sido blanco de actos de vandalismo y atentados incendiarios. Recientemente, el 7 de marzo, se registraron intentos de incendio en un centro de servicio y tienda de Tesla en Loveland, Colorado, según informaron las autoridades a CNBC.
Ben Kallo, analista de Baird, comentó en el programa “Squawk on the Street” que los informes recientes sobre actos de vandalismo podrían afectar la demanda. “Cuando los autos de las personas están en riesgo de ser rayados o incendiados, incluso quienes apoyan a Musk o son indiferentes a él, podrían pensárselo dos veces antes de comprar un Tesla”, dijo Kallo.
Foto de archivo del logo de la compañía. EFE/EPA/FELIPE TRUEBA
Declive en las ventas y su impacto en Tesla
Analistas de Bank of America publicaron un informe este lunes en el que destacaron que las ventas de vehículos nuevos de Tesla cayeron aproximadamente un 50% en Europa en enero, en comparación con el mismo mes del año pasado, en parte debido al creciente desagrado hacia la marca. El informe también indicó que algunos clientes potenciales están esperando el lanzamiento de la nueva versión del Model Y.
A pesar de la caída en ventas, el Tesla Model Y, un SUV compacto, se mantuvo como el vehículo eléctrico más vendido del mundo en enero, seguido por el Geely Geome de China, que superó al sedán Tesla Model 3 en ventas durante el mismo mes.
A nivel global, las ventas de vehículos eléctricos, incluyendo tanto los completamente eléctricos como los híbridos enchufables, aumentaron un 21% en enero en comparación con el año anterior, a pesar de la caída en las ventas de Tesla. Este crecimiento fue impulsado principalmente por la demanda en Europa, según Bank of America.