De verdad no entiende y no hace nada para entender. Andrés Manuel no sabe por qué hay violencia política de género en sus referencias a Xóchitl Gálvez y hasta se atreve a comparar lo que “dice” que dijo contra las evidencias recabadas por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
“¿Qué van a decidir? ¿Que yo no pueda referirme ya a la señora? Vamos a esperar, a mí lo que me llama la atención es que sostengan que yo agredí verbalmente a la señora, que hay violencia de género en lo que yo expresé. Y quiero que me digan, ¿qué fue lo que dije, según lo cual, se trató de un agravio o hay violencia de género, en qué?”
“Dije que era la candidata del bloque conservador, pues es cierto, ¿y eso cuál es la violencia de género?, ¿qué no es cierto que es la candidata de Claudio (X. González) y que él fue el que hizo la consulta porque es el gerente del bloque conservador?”
“(Es) la candidata de la mafia en el poder” y “la candidata de (Carlos) Salinas, (Vicente) Fox, Claudio X. González y otros traficantes de influencias”
“¿Dónde está la violencia? Esto es política, y es lo más legal que puede haber”
“¿Cómo no voy a poder expresarme? Porque tengo derecho además a la defensa. Que me digan los magistrados del Tribunal en donde está la violencia de género. La señora Xóchitl la escogen los oligarcas para engañar”
“Fue elegida por un grupo de hombres que la han impuesto. Es un pelele, un títere, una empleada de la oligarquía a la que únicamente van a utilizar para engañar al pueblo”
Todo lo anterior lo ha dicho Andrés Manuel López Obrador en las mañaneras. Según algunos estudiosos, lleva más de 50 referencias ofensivas a la Sra. Xóchitl Gálvez desde el pasado 27 de junio cuando anunció sus intenciones de sumarse al Frente Amplio por México.
AMLO minimiza el talento de Xóchitl, sólo la concibe como la operadora del poder patriarcal. Eso es violencia. Utiliza el foro y los recursos de su investidura para hacer afirmaciones sin pruebas y con dolo. Reproduce estereotipos de género.
Hay muchas explicaciones de estas agresiones: A AMLO le vale la ley, es misógino, no tiene empatía, se siente “el salvador del pueblo” y, no entiende figuras retóricas del lenguaje, verdaderamente no entiende. Se defiende con sus mismos recursos de siempre: más ataques, repitiendo los mismos conceptos y haciéndose víctima de los conservadores.
“Ayer hablé de que lo iba a acatar bajo protesta porque además de que limita mi libertad me impide informar al pueblo que hay un grupo que está acechando que quiere regresar al gobierno para robar”, dijo el mandatario.
Por supuesto que también tiene miedo, sus ataques los dirige a quien constituye una gran amenaza para la continuidad de su proyecto de transformación y, por ende, hacia sus corcholatas que no logran levantar el ánimo electoral.
De acuerdo con lo establecido en el artículo 20 bis de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, la violencia política de género es “toda acción u omisión […] basada en elementos de género y ejercida dentro de la esfera pública o privada, que tenga por objeto o resultado limitar, anular o menoscabar el ejercicio efectivo de los derechos políticos y electorales de una o varias mujeres […], violencia que puede ser perpetrada indistintamente por agentes estatales, […] por un particular o por un grupo de personas particulares”.
AMLO es limitado en sus habilidades del pensamiento, por eso no entiende por qué hay violencia de género en sus expresiones.
Las habilidades del pensamiento son capacidades mentales que nos permiten procesar, analizar, evaluar y utilizar información de manera efectiva para tomar decisiones informadas, resolver problemas, formar argumentos sólidos y comprender el mundo que nos rodea de una manera más profunda. Son determinantes en el uso y comprensión del lenguaje.
En el lenguaje hay figuras retóricas o recursos lingüísticos como la metáfora, la comparación, la hipérbole, la antítesis, la analogía, o la ironía entre otras. AMLO no entiende ninguna.
Como señala Luis Antonio Espino, especialista en discurso político y manejo de crisis de Letras Libres, “el lenguaje sirve para activar marcos conceptuales que ya existen en la mente de las personas. El presidente sabe, de modo intuitivo, usar el lenguaje para activar marcos mentales. En el caso de Xóchitl Gálvez, AMLO sabe que, al vincular “senadora”, “funcionaria”, “empresa”, “contratos” y “millones”, se activa de inmediato el marco mental de corrupción, robo y abuso. Esto porque la mayoría de la gente ya tiene muy arraigada en la mente la idea de que los políticos y altos funcionarios son corruptos y se roban millones mediante contratos para empresas de su propiedad”.
El TEPJF ya le puso el alto, pero él siempre tiene otros datos “…mienten, calumnian, actúan de manera falsaria, son capaces de alterar mis expresiones, mis palabras. Me acusan de violencia política de género. ¡Violencia política de género! Y lo que hacen es atribuirme expresiones que yo no expuse en esta conferencia. Es realmente grave”, expresó.
El presidente continuará contra Xóchitl quien, a diferencia de él, tiene un buen nivel de habilidades del pensamiento que se aprecia en su capacidad de expresión y agilidad en las respuestas ingeniosas y certeras contra AMLO, además de su carisma que le permite conectar muy bien con la gente. Ella genera esperanza lo cual enoja a Andrés Manuel.
Leticia Treviño es académica con especialidad en educación, comunicación y temas sociales, leticiatrevino3@gmail.com
