Yoon Suk-yeol enfrenta cargos de insurrección en Corea del Sur
Este jueves, los investigadores en Corea del Sur recomendaron formalmente imputar al expresidente Yoon Suk-yeol por los cargos de insurrección y abuso de poder. Esta recomendación se presentó a la Fiscalía luego de una investigación sobre la fallida declaración de ley marcial de Yoon, emitida el 3 de diciembre de 2024.
La Oficina de Investigación de la Corrupción (OIC) indicó que Yoon es acusado de «dirigir una insurrección y abuso de poder», al haber declarado la ley marcial el pasado 3 de diciembre, enviando luego soldados al Parlamento con el fin de evitar que los legisladores revocaran su intento de suspender el mando civil.
Yoon Suk-yeol pasó a la historia como el primer presidente en ejercicio de Corea del Sur que fue detenido. Tras presentar las evidencias, la OIC solicitó a la Fiscalía del Distrito Central de Seúl que proceda con la imputación formal de Yoon por dirigir una insurrección, entre otros cargos.
La Fiscalía tiene un plazo de 11 días para decidir si imputa a Yoon, lo cual podría resultar en un proceso penal. Esta decisión es clave para el futuro judicial del expresidente, quien fue detenido la semana pasada en el marco de esta investigación.
Los investigadores sostienen que el expresidente suspendido actuó de manera ilegal al declarar la ley marcial, con el objetivo de bloquear la autoridad estatal y perturbar el orden constitucional, lo que, según ellos, incitó a los motines en el país.
La crisis política derivada de la declaración de ley marcial dejó a Corea del Sur sumida en el caos. Se revocó la medida solo seis horas después de ser promulgada, pero los efectos políticos y económicos fueron inmediatos. Según datos divulgados por el banco central, la desaceleración económica fue notable durante este periodo.
En términos económicos, el Producto Interno Bruto (PIB) de Corea del Sur creció solo un 0,1% en el cuarto trimestre de 2024, en comparación con el trimestre anterior. Asimismo, el crecimiento interanual fue del 1,2%, según el Banco de Corea, lo que refleja el impacto negativo que tuvo la crisis política en la economía surcoreana.