La presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, anunció este jueves (02.05.2024) un paquete de ayuda comunitaria al Líbano por valor de 1.000 millones de euros para apoyar la gestión de los refugiados sirios en su territorio, así como otros asuntos.
Durante la visita oficial a Beirut, Von der Leyen indicó que la ayuda, que «estará disponible desde ahora hasta 2027», es para que el Líbano pueda gestionar la migración siria.
Asimismo, la UE pretende contribuir a la «estabilidad socieconómica» del país mediterráneo, respaldando servicios básicos como la educación y sanidad; ayudando a la implementación de reformas económicas y del sistema bancario, o fortaleciendo la labor de las fuerzas de seguridad libanesas.
La presidenta de la CE viaja acompañada del presidente de Chipre, Nikos Jristodulidis, quien estuvo trabajando para promover un acuerdo con foco en la migración después de que recientemente se registrara un fuerte incremento en la llegada de embarcaciones con refugiados de Siria a las costas chipriotas, a menudo procedentes del Líbano.
«La situación actual no es sostenible para el Líbano, no es sostenible para Chipre, no es sostenible para la Unión Europea», alertó Jristodulidis en la comparecencia.
En línea con declaraciones anteriores, el presidente chipriota destacó la «enorme presión» que la presencia de casi 1,5 millones de refugiados sirios pone sobre la «economía y sociedad» libanesas, al tiempo que llamó a no seguir lidiando con el problema «como de costumbre».
Desde el inicio de una grave crisis económica en el Líbano a finales de 2019, las autoridades libanesas han insistido en que la comunidad siria debe regresar a su país.
Pese a que tras trece años de guerra los frentes de batalla están prácticamente congelados en Siria, organizaciones de derechos humanos consideran que el retorno no es seguro debido en parte a las represalias que las autoridades de Damasco pueden tomar contra quienes abandonaron el país.