El gobierno de Estados Unidos ha ejercido presión sobre Ucrania para que retire un proyecto de resolución en las Naciones Unidas que condena la invasión rusa de su territorio. En su lugar, Washington ha propuesto una resolución con un tono más conciliatorio hacia Rusia, lo que ha generado controversia entre los aliados en la ONU. Según un informe del diario The Washington Post, se espera que la nueva resolución presentada por Estados Unidos compita con el texto apoyado por la Unión Europea y Ucrania, que será sometido a votación en la Asamblea General de la ONU este lunes, en el tercer aniversario de la invasión rusa de Ucrania.
El borrador de la resolución estadounidense
Aunque el borrador del texto alternativo presentado por Estados Unidos aún no se ha hecho público, fuentes diplomáticas citadas por The Washington Post señalan que se trata de un documento «corto» que parece más un «llamamiento a la conciliación» con el presidente ruso, Vladimir Putin, que una declaración enérgica de apoyo a la paz. La resolución de Washington busca un enfoque menos confrontativo, lo que contrasta con la postura firme que han adoptado la Unión Europea y Ucrania en cuanto a la condena de la invasión rusa.
Fotografía de archivo del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, durante su visita a Emiratos Árabes Unidos (EUA). EFE/ Presidencia de Ucrania
La postura de EE.UU. frente a la guerra en Ucrania
Marco Rubio, Secretario de Estado de Estados Unidos, defendió la nueva resolución, destacando que se trata de un texto «simple e histórico». Según Rubio, la resolución está alineada con la visión del expresidente Donald Trump, quien ha sido crítico con la forma en que la ONU maneja los conflictos internacionales. Rubio subrayó que la resolución de su país busca volver a los principios fundacionales de la ONU, los cuales establecen la necesidad de «mantener la paz internacional y la seguridad».
En su comunicado, Rubio también remarcó que la guerra entre Ucrania y Rusia se ha prolongado por un tiempo excesivo y que ha tenido un costo «terrible» para ambos países. Esta declaración resalta el creciente desencanto en Estados Unidos por el conflicto, que ha generado un debate interno sobre la cantidad de recursos que Washington está destinando a la guerra.
Trump y su enfoque sobre la guerra en Ucrania
La resolución presentada por EE.UU. también llega poco después de una declaración polémica de Donald Trump, quien evitó calificar a Putin como «dictador», un término que ha utilizado para referirse al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Trump, quien ha sido un crítico abierto de la implicación de Estados Unidos en la guerra, insistió en la necesidad de que los dos líderes, Putin y Zelenski, «se sienten juntos» para negociar el fin del conflicto. Según Trump, los soldados ucranianos están «derramando su sangre» en la guerra, pero advirtió que Estados Unidos está gastando un «tesoro» en un conflicto que se libra en un país lejano y que, en su opinión, no está tratando a Washington de manera justa.
Trump también subrayó que Ucrania está «abusando» de la ayuda militar proporcionada por Estados Unidos, lo que ha alimentado las tensiones entre el expresidente y los líderes ucranianos. Esta postura ha generado un choque directo con la administración actual y ha llevado a un enfriamiento en las relaciones entre EE.UU. y Ucrania.

Combo de fotografías del presidente de Estados Unidos, Donald Trump (i), y el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. EFE/Francis Chung/Albert Zawada
Tensión en las relaciones entre Ucrania y Estados Unidos
La propuesta de resolución alternativa de EE.UU. ha aumentado las tensiones entre Washington y Kiev. Este conflicto diplomático se intensificó después de que Trump anunciara, el pasado 12 de febrero, que había hablado por teléfono con Putin y había alcanzado un acuerdo con Rusia para iniciar «negociaciones de inmediato» con el objetivo de poner fin a la guerra. Esta sorpresa fue especialmente fuerte para Europa y Ucrania, quienes no estaban al tanto de las conversaciones.
En Arabia Saudí, el 13 de febrero, se celebró una reunión entre delegaciones rusas y estadounidenses en la que acordaron comenzar a trabajar para mejorar sus relaciones económicas y diplomáticas, lo que podría culminar en una cumbre entre Trump y Putin. La exclusión de Ucrania de estas conversaciones ha enfurecido al presidente Zelenski, quien ha protestado por lo que considera una falta de consideración hacia su país.
Zelenski ha intensificado su enfrentamiento con Trump, acusándolo de vivir en una «burbuja de desinformación» impulsada por Rusia. Por su parte, Trump ha respondido calificando a Zelenski de «dictador», un término que ha usado repetidamente para referirse al líder ucraniano debido a su postura en la guerra y sus críticas a la política de Estados Unidos.