Una asociación suiza ocultó en la ciudad de Friburgo una joya de oro, esmeraldas y diamantes valorada en 18.000 francos (19.000 euros) y creó diversos enigmas conducentes a descubrirla, en una caza del tesoro inspirada en la que recientemente terminó en París tras 31 años de búsqueda.
La joya a encontrar, enterrada en un cofre, es la «Esmeralda del Colibrí», y para participar en la búsqueda los amantes del misterio deben adquirir un libro que contiene los 15 enigmas, según se indica en la web de la asociación Enigmadventure.
La joya ha sido creada por un artista local, y con esta búsqueda también se pretende promover la cultura de Friburgo, ciudad situada en la frontera lingüística entre la Suiza francoparlante y germanoparlante, a orillas del río Sarine y con un atractivo casco antiguo medieval.
La caza del tesoro está inspirada en el enigma de la «Lechuza de Oro», iniciado en la vecina Francia en 1993, en el que se proponía encontrar una estatuilla que no se halló hasta tres décadas después, el pasado 3 de octubre.