El presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, reelegido para un segundo mandato, juró el cargo este miércoles (19.06.2024) durante una ceremonia de investidura en la sede del gobierno, el Union Buildings, en Pretoria. Al acto asistieron una veintena de jefes de Estado y de gobierno, que fueron recibidos por músicos y bailarines locales. También se dispararon 21 cañonazos y se entonó el himno nacional, y varios helicópteros militares desplegaron banderas nacionales en el cielo.
«Yo, Matamela Cyril Ramaphosa, juro que seré fiel a la República de Sudáfrica y obedeceré, observaré y mantendré la Constitución y todas las otras leyes de la República», declaró al jurar el cargo. «Prometo solemne y sinceramente que promoveré siempre todo lo que haga avanzar a la República y me opondré a todo lo que pueda dañarla, (y) protegeré y promoveré los derechos de todos los sudafricanos», añadió el mandatario.
Ramaphosa, líder del Congreso Nacional Africano (CNA), que ha gobernado Sudáfrica desde el fin del apartheid, se convirtió en presidente tras la dimisión de Jacob Zuma en 2018, y en 2020 fue reelegido. En las elecciones del 29 de mayo, salió nuevamente reelegido, pero los votantes castigaron al histórico partido de Nelson Mandela, en un contexto de creciente pobreza, paro endémico y casos de corrupción, y el ANC sólo obtuvo 159 escaños de los 400 que componen el Parlamento, perdiendo por primera vez la mayoría absoluta.
«La formación de un gobierno de unidad nacional es un momento de profunda importancia. Es el comienzo de una nueva era», declaró Ramaphosa tras tomar posesión del cargo, ante Raymond Zondo, presidente de la Corte Constitucional, máximo tribunal del país. Ramaphosa deberá dirigir un gobierno de coalición y compartir el poder con parte de la oposición. El principal partido de la oposición, la Alianza Democrática (DA), una formación liberal que tiene 87 diputados, respondió afirmativamente al llamado de Ramaphosa de formar un gobierno de unidad. También lo hizo el partido nacionalista zulú Inkatha Freedom Party (IFP), que obtuvo 17 bancas, y otros dos partidos más pequeños.
Los radicales de izquierda Fighters for Economic Freedom (EFF), de Julius Malema, y el partido uMkhonto weSizwe (MK) del expresidente, inhabilitado, Jacob Zuma, acercaron posiciones en los últimos días y prometieron «aplastar» la alianza gubernamental «dirigida por blancos».