El presidente francés, Emmanuel Macron, reclamó este martes (18.06.2024) el fin de los bloqueos en Nueva Caledonia, que desde hace un mes ha vivido una revuelta de los independentistas contra la ampliación del cuerpo electoral que ha dejado a este archipiélago francés casi paralizado.
En una carta enviada a los 270.000 habitantes de Nueva Caledonia, Macron recuerda que ha renunciado a reunir el Congreso francés (las dos cámaras parlamentarias) para adoptar de forma definitiva la reforma electoral que provocó el estallido social iniciado el 13 de mayo, en el que han muerto nueve personas.
Sobre todo, el presidente francés, dice que ahora espera «el levantamiento firme y definitivo de todos los bloqueos y la condena de la violencia sin ambages» porque «la situación a la que unos pocos han reducido Nueva Caledonia es inadmisible y los que la han alentado tendrán que responder por sus actos».
Muchas carreteras siguen cortadas por piquetes de independentistas o de otros grupos, lo que ha impedido en gran medida que se restablezca la normalidad.
Macron pide «a todos» que no cedan «a las presiones ni al desaliento» y que se alcen para la reconstrucción de este territorio que fue colonizado por Francia. Una reconstrucción que, según su análisis, no será posible más que por «la vuelta al diálogo» que «debe permitir definir un proyecto de sociedad común de todos los caledonianos respetando su historia, su identidad propia y sus aspiraciones».
En el origen del estallido está el proyecto de reforma constitucional que iba a ampliar el cuerpo electoral con residentes que se han instalado en los últimos años y que iba a reducir todavía más el peso de los indígenas canacos, que son alrededor del 40 % de la población.