El incendio forestal más grave de los últimos 50 años en Japón ha sido finalmente controlado por los bomberos, luego de 11 días de lucha incansable en la prefectura de Iwate, ubicada en el noreste del país. El incendio, que comenzó a principios de marzo, ha consumido vastas áreas de terreno, afectando tanto a las comunidades locales como al medio ambiente.
La devastación en Ofunato: 2.900 hectáreas consumidas por el fuego
La ciudad de Ofunato ha sido una de las más afectadas por el incendio. Los bomberos han logrado controlar las llamas que, durante días, se propagaron rápidamente debido a las condiciones climáticas adversas. El fuego arrasó con aproximadamente 2.900 hectáreas de bosques y tierras cercanas, causando enormes pérdidas materiales y emocionales a los habitantes de la zona.
El alcalde de Ofunato, Kiyoshi Fuchigami, compareció ante los medios este domingo para informar que la situación está mejorando. Indicó que a partir del lunes, a mediodía, se suspenderían las órdenes de evacuación que habían afectado a unos 2.500 residentes de la ciudad costera, donde habitan unas 35.000 personas.

Gente mira el humo de los incendios en Ofunato (Japón). EFE/EPA/Jiji Press
El impacto del clima seco en el incendio forestal
La propagación del incendio fue facilitada por una prolongada sequía en la región, que había registrado niveles de precipitación histórica mínimos en las últimas semanas. Las lluvias, que llegaron con fuerza el miércoles pasado, ayudaron significativamente a frenar el avance del fuego y facilitaron el trabajo de los bomberos.
El incendio ha dejado tras de sí un rastro de destrucción en la prefectura de Iwate, y se teme que la situación empeore aún más si las condiciones meteorológicas no mejoran. La región sigue enfrentando altos niveles de sequedad, lo que podría reavivar el incendio en las áreas afectadas.
El mayor incendio forestal en Japón en más de tres décadas
Este incendio se considera el mayor desastre forestal en Japón en más de 30 años. La magnitud de la catástrofe ha sorprendido a muchas personas, especialmente en la ciudad de Ofunato, que aún recuerda el devastador terremoto y tsunami de 2011. En esa ocasión, el desastre natural destruyó muchas viviendas y dejó más de 500 personas muertas o desaparecidas en la región.
Un residente de 70 años, que vivió ambos desastres, comentó a la cadena NHK: «Parece como si el tsunami viniera por delante y el fuego por detrás. Espero que el fuego se apague rápidamente para que no se extienda más».
La respuesta del gobierno japonés ante el incendio forestal
El gobierno japonés ha intensificado sus esfuerzos para controlar el incendio forestal en Iwate. Yoshimasa Hayashi, portavoz del gobierno nipón, destacó en una rueda de prensa que se están tomando todas las medidas necesarias para asegurar la seguridad de los residentes y contener el fuego en las zonas más afectadas.
Para ello, se ha solicitado la ayuda de bomberos de todo el país. Un total de 1.700 bomberos, provenientes de 453 departamentos de Japón, están trabajando para extinguir el fuego. Además, las Fuerzas de Autodefensa (Ejército japonés) están apoyando las labores con helicópteros y otros equipos especializados.

Un helicóptero militar ayuda en los esfuerzos de extinción de incendios mientras el humo se eleva desde las colinas de Ofunato, prefectura de Iwate, noreste de Japón, 28 de febrero de 2025. EFE/EPA/Jiji Press
Víctimas y daños materiales del incendio forestal
Aunque los esfuerzos de extinción han dado frutos, hasta ahora se ha confirmado al menos una víctima mortal y 84 hogares destruidos por las llamas. Las autoridades han señalado que es probable que el número de afectados aumente una vez se logre controlar por completo el fuego. Actualmente, las labores de extinción son prioritarias, por lo que no se ha podido evaluar con precisión la magnitud total del daño.
Las autoridades también han emitido alertas debido a los vientos secos que continúan afectando la región. Esto aumenta el riesgo de que el incendio se propague aún más si las condiciones climáticas no mejoran en las próximas horas.
Evacuaciones y sus consecuencias en la vida cotidiana
La evacuación de más de 2.500 personas en Ofunato ha alterado profundamente la vida cotidiana de los residentes. Las autoridades han abierto doce centros de evacuación en la región para albergar a los desplazados y garantizar su seguridad.
Además, el incendio ha tenido repercusiones en los exámenes generales de acceso a las escuelas secundarias de la prefectura de Iwate. Estos exámenes, previstos para el 5 y 6 de marzo, fueron pospuestos debido a la evacuación de estudiantes y profesores. La prefectura ha establecido una nueva fecha para aquellos que no pudieron asistir a los exámenes debido al incendio.