Las fuerzas israelíes informaron este viernes (27.09.2024) que habían interceptado, pasada la medianoche y fuera del territorio israelí, un misil «tierra-tierra” de largo alcance lanzado desde Yemen por los rebeldes hutíes. «Las sirenas (antiaéreas) que sonaron son el resultado de un misil que fue disparado desde Yemen. Se lanzó un interceptor. Los detalles están bajo revisión», anunció un comunicado castrense.
Poco después, el Ejército confirmó que el misil había sido interceptado por el sistema ‘Arrow’ fuera de las fronteras israelíes, pero que se habían escuchado «sirenas y explosiones» tras la interceptación, además de la caída de metralla. «Actualmente no hay ningún cambio en las directrices defensivas de las Fuerzas de Defensa de Israel”, añade el comunicado, que no reportó víctimas.
Se trata, al menos, del segundo misil de este tipo lanzado contra el centro de Israel esta semana, después de que el pasado día 25 de septiembre Hezbolá hiciera lo propio, activando las alarmas en Tel Aviv y otras áreas próximas. Según el Ejército israelí, era la primera vez que la milicia chiita libanesa apuntaba a Tel Aviv, lo que desencadenó intensos bombardeos israelíes en represalia.
Hutíes «no dudarán”
El líder de los rebeldes hutíes, Abdul Malik al-Huthi, había dicho el jueves en un mensaje televisado que el grupo, que es apoyado por Irán, «no dudará en apoyar a Líbano y a Hezbolá”, mientras el intercambio de fuego entre la milicia y las fuerzas israelíes se intensifica. En julio, los hutíes atacaron Tel Aviv con un dron, causando la muerte de una persona y dejando cuatro heridos.
Israel ha cambiado el foco de sus ofensivas militares desde la Franja de Gaza, donde sus fuerzas siguen operando, hacia la frontera norte del país, para confrontar los ataques de Hezbolá, grupo aliado de Hamás. El jueves, las autoridades israelíes rechazaron una propuesta de cese al fuego de 21 días en Líbano, señalando que seguirán combatiendo a Hezbolá «hasta la victoria”.
