El Ejército israelí ha lanzado durante las últimas horas una serie de ataques en el campo de desplazados de Jabalia, en el norte de Gaza, a las pocas horas del reinicio de sus operaciones en la parte septentrional del enclave palestino que anunció este pasado sábado.
La agencia de noticias palestina Maan, citando fuentes locales, informa de bombardeos sobre zonas residenciales al este del campamento de Jabalia y en las proximidades de los centros de refugio en el centro del campamento, así como la mezquita Ahmed bin Hanbal, en los aledaños al este del lugar.
Es más, testigos de la cadena panárabe Al Yazira han asegurado que varios tanques isrealíes han comenzado a avanzar hacia el campamento, cruzando la carretera de Saladino que atraviesa la Franja, y están comenzando a rodear los centros de evacuación.
El Ejército israelí también ha atacado otros puntos del norte de Gaza, especialmente en Beit Lahia. La agencia oficial de noticias palestina Wafa ha informado de una docena de muertos en ataques nocturnos de Israel, que además han dejado decenas de desaparecidos entre los escombros.
La nueva ofensiva de Israel en el norte de Gaza fue anunciada este pasado sábado en un retorno a las operaciones en la zona, aparentemente terminadas en enero — cuando el Ejército israelí reclamó el total «control operativo» de la zona — al entender que las milicias de Hamás se estaban «recomponiendo».
Según fuentes del Canal 13 de la televisión israelí, el jefe del Estado Mayor del Ejército de Israel, el general Harzi Halevi, reconoció ante el gabinete de guerra israelí que el retorno al combate en el norte de la Franja «es una tarea digna de Sísifo» que «habrá que repetir una y otra vez sin un proceso para establecer en Gaza una autoridad y una infraestructura que no sean la de Hamás».
De hecho, fuentes del Ejército israelí citadas por el ‘Jerusalem Post’ anticipan, a raíz de esta campaña renovada, un nuevo desplazamiento forzado de entre 100.000 y 150.000 personas que regresaron al norte de Gaza en los últimas semanas.