El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, ha rechazado categóricamente las acusaciones de que Irán haya intentado asesinar al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, durante su campaña electoral. Las autoridades estadounidenses habían señalado en noviembre de 2024 que un ciudadano iraní había organizado un complot de asesinato a sueldo contra el entonces candidato presidencial, en lo que, según Washington, sería una trama orquestada por el gobierno de Teherán. Sin embargo, Pezeshkian afirmó en una reciente entrevista con la cadena NBC que Irán nunca planeó un ataque contra Trump.
Irán niega las acusaciones sobre el complot contra Trump
En su conversación con la cadena de televisión estadounidense, Pezeshkian calificó las acusaciones de un complot iraní como parte de una estrategia de desinformación que busca fomentar la iranofobia. “Este es otro de esos planes que Israel y otros países están diseñando para promover la iranofobia… Irán nunca ha intentado ni planea asesinar a nadie, al menos hasta donde yo sé”, aseguró el presidente iraní.
Al ser interrogado específicamente sobre si hubo un complot para asesinar a Trump, Pezeshkian respondió de manera contundente: «Nunca en absoluto». También, al ser preguntado si podía prometer que Irán no llevaría a cabo un intento contra la vida de Trump, reafirmó que Teherán “nunca” había tenido tal intención y que no lo haría en el futuro.
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Contexto de las acusaciones y la muerte de Qasem Soleimani
Washington sostiene que el presunto complot de asesinato en contra de Trump tendría su origen en represalias por la muerte del general Qasem Soleimani, quien fue abatido en un bombardeo estadounidense en Irak en enero de 2020. La muerte de Soleimani marcó un punto de inflexión en las relaciones entre Estados Unidos e Irán, y desde entonces, el país ha amenazado repetidamente con vengar su muerte. Las tensiones entre ambos países se han intensificado, alimentando teorías sobre posibles acciones de represalia, incluido el supuesto intento de asesinar a Trump.
Sin embargo, Pezeshkian subrayó que estas acusaciones no solo eran infundadas, sino que formaban parte de una narrativa impulsada por países que buscan justificar su hostilidad hacia Irán y crear un clima de desconfianza internacional en torno al país.
Relaciones con la nueva administración de Trump
A pesar de las tensiones, Pezeshkian ha afirmado que su gobierno está dispuesto a mantener un diálogo con la segunda administración de Donald Trump. Pezeshkian ha subrayado que, aunque el país está abierto a la conversación, existe una desconfianza respecto a los compromisos previos incumplidos por parte de Estados Unidos. «El problema no está en el diálogo, sino en los compromisos que surgen de las conversaciones», manifestó el presidente iraní, recordando que Teherán ha cumplido con sus compromisos, mientras que Estados Unidos no ha hecho lo mismo.
El gobierno, según Pezeshkian, teme que cualquier intento de diálogo por parte de Estados Unidos esté dirigido no a resolver los problemas, sino a desestabilizar aún más la región y derrocar al gobierno. “Como es lógico, reaccionaremos ante cualquier acción. No tememos la guerra, pero no la buscamos. Espero solemnemente que esto no ocurra, porque sería perjudicial para todos los actores, no solo para nosotros”, expresó el presidente.
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La postura de Irán en Oriente Medio
En cuanto a la situación en Oriente Medio, Pezeshkian negó que la posición del país se haya debilitado debido a los recientes desarrollos en la región. A pesar de las bajas sufridas por el partido-milicia chií libanés Hezbolá, las incursiones de Israel contra grupos militantes como Hamás en Gaza y los ataques israelíes en territorio iraní, el presidente iraní afirmó que la nación persa sigue siendo fuerte y coherente. “En comparación con el año pasado dentro del país, somos más coherentes. Más sólidos. Tenemos una seguridad más sólida”, afirmó Pezeshkian, destacando la estabilidad interna de Irán a pesar de los desafíos internacionales.
Además, el Pezeshkian subrayó que su gobierno está comprometido con la paz en la región, refiriéndose a los esfuerzos para lograr un alto el fuego en la Franja de Gaza. A pesar de las complicadas relaciones con algunos de los actores involucrados en el conflicto israelí-palestino, Teherán ha expresado su disposición a contribuir a la resolución de la crisis.
Irán y su política en Gaza
En cuanto a la situación de Gaza, Pezeshkian se mostró firme en su compromiso por lograr la paz en la región, y subrayó que Irán sigue haciendo «todo lo posible para que la paz prevalezca». Si bien la nación persa tiene una postura ideológica que apoya la resistencia palestina, el presidente destacó que la prioridad es alcanzar una solución pacífica para la región.
El país ha sido tradicionalmente un aliado cercano de grupos como Hezbolá y Hamás, y ha apoyado sus luchas contra Israel. Sin embargo, la diplomacia parece estar en un punto de flexibilidad, ya que el gobierno de Pezeshkian busca equilibrar su apoyo a los grupos de resistencia con la necesidad de alcanzar una resolución que termine con las continuas tensiones en la región.