El Gobierno de Hamás en la Franja de Gaza denunció este lunes que más de 320 muertos y heridos han llegado a los hospitales del enclave en los últimos dos días con el cuerpo quemado por el uso de “armas prohibidas internacionalmente” por parte del Ejército israelí.
“Según estimaciones médicas, las armas utilizadas por las fuerzas de ocupación israelíes que provocan quemaduras de tercer grado son armas térmicas o químicas”, dijo el grupo islamista en un comunicado.
Hamás añadió que muchas de estas armas son de fabricación estadounidense, y reiteró su mensaje de que consideran al Gobierno de EE.UU. responsable de la violencia por el envío de armamento a Israel.
Según el grupo islamista, EE.UU. ha enviado a Israel bombas tipo GBU 28, bombas guiadas por GPS destinadas a destruir infraestructuras, bombas de fósforo blanco prohibidas internacionalmente, bombas no guiadas y bombas inteligentes JDAM, entre otras.
Munición usada en el ataque de Mawasi
Algunos medios han publicado en las últimas horas que este último tipo de munición fue la que se usó en el ataque del sábado contra la zona humanitaria de Mawasi, en el sur de la Franja, dirigido contra el ‘número 2’ de Hamás en el enclave, Mohamed Deif, y en el que murieron unas 90 personas.
El destino de Deif es incierto, pero en el bombardeo sí murió su mano derecha, el comandante de la brigada de Jan Yunis, Rafaa Salameh.
Solo en las últimas 24 horas, los ataques israelíes dejaron 80 muertos y 216 heridos en la Franja, según el Ministerio de Sanidad gazatí, controlado por Hamás.