La policía de Islandia canceló el lunes la búsqueda de dos turistas que inicialmente se creían desaparecidos tras el derrumbe de una cueva de hielo que mató a una persona e hirió gravemente a otra. Las autoridades ahora creen que no hay nadie desaparecido.
Inicialmente los rescatistas habían trabajado a mano el lunes para llegar al lugar del colapso luego de que un glaciar en el sureste de la isla se derrumbara.
Las autoridades islandesas informaron que cancelaron la búsqueda después de examinar los registros del operador turístico y determinar que sólo 23 personas estaban en el viaje, no 25 como se creyó en un principio.
La búsqueda, que se suspendió durante la noche porque las condiciones la hacían demasiado peligrosa, se reanudó alrededor de las 7:00 am (hora local), según informó la emisora islandesa RUV. Un video mostraba a los equipos de rescate trabajando en el interior de dos grandes cráteres rodeados por el hielo ennegrecido por la arena del glaciar Breidamerkurjokull.
“Tenemos tres equipos que trabajan por turnos durante una hora sacando y rompiendo el hielo”, explicó a RUV el jefe de la policía local, Sveinn Rúnar Kristjánsson. “Mientras tanto, por supuesto, seguimos en esta labor de investigación, averiguando quién puede estar ahí abajo, bajo el hielo. Este trabajo continúa”.
La policía indicó que un grupo de 25 turistas de varios países estaban explorando una cueva de hielo en Breidamerkurjokull cuando se derrumbó poco antes de las 3:00 pm del domingo. Cuatro personas fueron alcanzadas por el hielo, una de las cuales falleció en el lugar de los hechos y otra fue trasladada en helicóptero a un hospital de la capital, Reikiavik. Las autoridades no han revelado los nombres ni las nacionalidades de las víctimas.
La Asociación Islandesa de Guías de Montaña pidió el domingo una investigación exhaustiva y normas más estrictas para las excursiones a cuevas de hielo. Los viajes a los glaciares durante los meses más cálidos del verano pueden ser muy peligrosos, según la organización.
Las cuevas de hielo son un destino popular para los visitantes de Islandia, con operadores turísticos que ofrecen a los clientes la oportunidad de “explorar el interior de los glaciares” y ver el color azul y los “patrones impresionantes” en el hielo.
“Es un suceso terrible por el que no se quiere que pase nadie″, declaró Garðar Hrafn Sigurjónsson, vicepresidente de la asociación, a la web local de noticias Visir. “Lamentamos este terrible accidente en el Breiðamerkurjökull, tanto yo personalmente como la asociación”, añadió.
Visir contó que el grupo que se encontraba en la cueva durante el derrumbe estaba en una excursión organizada acompañado por un guía. La mayoría de los visitantes estaban fuera de la cueva cuando se derrumbó, explicó.
Los glaciares cubren alrededor del 11% de Islandia, un país insular situado en el Atlántico Norte, en el extremo sur del Círculo Polar Ártico. El mayor es el Vatnajokull, que cubre 3,050 millas cuadradas. Breidamerkurjokull es una extensión del Vatnajokull que termina en la laguna de Jokulsarlon, donde se desprenden constantemente icebergs del glaciar.
El traslado de los equipos y el personal de rescate hasta el glaciar fue difícil debido a lo accidentado del terreno, y los rescatadores tuvieron que cortar el hielo con motosierras.
El glaciar está a unas 185 millas de un volcán que entró en erupción el viernes en la península de Reykjanes, en el suroeste de Islandia.