Al menos cinco opositores encarcelados en Rusia fueron transferidos en los últimos días a destinos de momento desconocidos, indicaron sus familiares y oenegés, algo inusual en el sistema penitenciario ruso.
Uno de ellos es Ilia Yashin, condenado a finales de 2022 a ocho años y medio prisión por haber imputado crímenes a Moscú en Ucrania, había «desaparecido» de la prisión en la que cumplía su pena, en la región de Smolensk, denunció este martes (30.07.2024) su equipo en Telegram.
En tanto, la oenegé Memorial afirmó que Oleg Orlov, condenado a dos años y medio de prisión por haber criticado la ofensiva rusa contra Ucrania, también había desaparecido del centro de detención provisional de Syzran, en la región de Samara.
A Ksenia Fadeyeva y Lilia Chanysheva, dos cercanas del fallecido opositor Alexei Navalny, condenadas respectivamente a nueve y nueve años y medio de prisión por «extremismo», también las sacaron de sus lugares de detención, según el esposo de Chanysheva y el grupo de apoyo de Fadeyeva.
El grupo de apoyo de la artista Alexandra Skochilenko, condenada a siete años de cárcel por una acción pacifista, afirmó en Telegram que esta había sido trasladada de San Petersburgo «supuestamente» a Moscú.
Algunos observadores han especulado con la posibilidad de que se esté preparando un intercambio de prisioneros de opositores y estadounidenses detenidos en Rusia: «Pareciera que estemos en la antesala de un intercambio muy importante (y no solo con los estadounidenses)», apuntó en Telegram la politóloga independiente Tatiana Stanovaya, en el exilio.
Rusia suele encarcelar a sus opositores y a veces lso traslada hacia destinos desconocidos. El otrora archienemigo del Kremlin, Alexei Navalny, murió en oscuras circunstancias en febrero de 2024, en una cárcel de alta seguridad del Ártico.