Las autoridades del distrito de Bolshesoldatski de la región rusa de Kursk, donde Ucrania lleva a cabo una operación militar desde el pasado 6 de agosto, anunciaron este martes la evacuación de la población ante la inestable situación en la zona.
«Hasta ahora no había una evacuación en nuestro distrito. Los que querían, se marchaban por su cuenta y nadie les ponía obstáculos. Hoy empezamos a recoger los datos de las personas que sí necesitan ser evacuadas», escribió el dirigente local, Vladimir Zaitsev, en su canal de Telegram.
En el distrito de Bolshesoldatski, colindante con el distrito de Sudzha, el primer objetivo de la incursión ucraniana, viven unas 10.000 personas.
Se trata de un territorio próximo a la ciudad de Kurchatov, que acoge la central atómica de Kursk, y a la capital regional, con unos 430.000 habitantes.
El gobernador de la región, Alexéi Smirnov, reconoció ayer que unas 121.000 personas ya han sido evacuadas de las zonas fronterizas con Ucrania y otras 60.000 serían trasladadas a sitios más seguros más adelante.
Smirnov también aseguró que las fuerzas ucranianas controlan ya 28 localidades en territorio de Kursk, donde viven unas 2.000 personas sin que su suerte se conozca hasta el momento.
Ucrania, por su parte, reconoció ayer por primer vez que sus fuerzas se encuentran en territorio ruso y aseguró que en el marco de la operación en Kursk controlan ya unos 1.000 kilómetros cuadrados.
Ucrania restringe el movimiento de los civiles en la región de Sumi, fronteriza con Kursk
Las autoridades ucranianas decidieron este martes restringir los movimientos de los civiles por razones de seguridad en parte de la región de Sumi, que limita con la región rusa de Kursk, en el que las fuerzas ucranianas lanzaron una incursión la semana pasada.
Las restricciones se establecen por «el incremento de los combates, la intensificación de las actividades de sabotaje y de los grupos de reconocimiento y fuerzas de operaciones especiales del enemigo y para preservar las vidas de la población civil y el personal militar», informó el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Se verán afectados los civiles que residen en una franja de 20 kilómetros desde la frontera, agregó el Ejército en un comunicado de Facebook.
A esta zona sólo se podrá acceder tras mostrar un pasaporte ucraniano en el que figure una dirección que acredite al portador como residente en esta franja, señaló la nota, que subrayó que se trata de medidas temporales.
En su parte matinal, el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas indicó que en las fronteras de las regiones norteñas de Cherníguiv y Sumi el enemigo realiza ataques de artillería contra zonas pobladas desde el territorio de la Federación de Rusia.
El parte no hizo referencia a la operación ofensiva lanzada la semana pasada en Kursk, que según afirmó este lunes el comandante en jefe del Ejército ucraniano, Oleksandr Sirski, ha colocado bajo el control de Kiev territorios rusos con una extensión de 1.000 kilómetros cuadrados.
Por otro lado, el informe del Ejército destacó que Rusia avanzó en las últimas 24 horas en el frente de Pokrovsk, en la región oriental ucraniana de Donetsk, donde Moscú está intensificando sus ataques con un total de 52 asaltos lanzados a lo largo de la última jornada.