Amanda Knox, la estadounidense que pasó cuatro años en la cárcel en Italia por el asesinato de su compañera de piso antes de ser absuelta del delito, vuelve este miércoles a un tribunal italiano para tratar de anular un cargo menor relacionado con el caso que atrajo la atención mundial hace más de una década.
Esta vez, Knox lucha por anular una condena por difamación por acusar falsamente a su entonces jefe, Patrick Lumumba, del asesinato de Meredith Kercher, la compañera de piso británica de Knox cuando ambas eran estudiantes en la ciudad italiana de Perugia.
El cuerpo de Kercher fue encontrado el 2 de noviembre de 2007 con heridas de arma blanca en el cuello en el apartamento que compartía con Knox y dos mujeres italianas en Perugia.
Lumumba fue detenido por el asesinato en noviembre de 2007 junto con Knox y su entonces novio Raffaele Sollecito, basándose en la confesión de Knox a la policía durante un interrogatorio sin la presencia de un abogado.
Lumumba, originario de la República Democrática del Congo, estuvo casi dos semanas en la cárcel antes de que la falta de pruebas condujera a su puesta en libertad.
Knox, Sollecito y el marfileño Rudy Guede, cuyo ADN estaba presente en la habitación del crimen, fueron condenados por el asesinato en 2009. Guede admitió haber estado en la casa con Kercher la noche en que murió, pero negó haberla matado. Dijo que Knox y Sollecito también estaban allí.
Guede cumplió 13 años de una condena de 16 y fue puesto en libertad en 2021.