La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, presentó este jueves una iniciativa de reforma constitucional que incluye dos párrafos adicionales al artículo 40 de la Constitución mexicana con el objetivo de rechazar cualquier forma de intervención extranjera en el país. En su mensaje, Sheinbaum enfatizó la importancia de fortalecer la soberanía nacional y aseguró que la reforma refleja el compromiso de México con su independencia e integridad.
En un mensaje difundido en sus redes sociales, la presidenta señaló que la propuesta busca asegurar que México no se subordine a ninguna otra nación. “Enviamos una reforma constitucional para fortalecer la soberanía nacional; reformamos los artículos 19 y 40. Colaboramos, nos coordinamos, pero nunca nos subordinamos. No injerencismo y menos invasión», afirmó Sheinbaum.
Reforma constitucional para rechazar intromisiones extranjeras
La reforma presentada por la presidenta Claudia Sheinbaum incluye una adición crucial al artículo 40 de la Constitución, cuyo propósito es garantizar que México rechace cualquier tipo de intervención externa que afecte su soberanía. Durante su conferencia de prensa diaria, Sheinbaum detalló que esta reforma se da en respuesta a la creciente preocupación sobre la intromisión extranjera, especialmente después de que el gobierno de Estados Unidos declarara como organizaciones terroristas a seis poderosos carteles del narcotráfico en México.
Con esta iniciativa, Sheinbaum busca que México afirme, de manera clara y legal, que el país nunca aceptará intervenciones o injerencias extranjeras. El artículo 40 reformado establecía previamente la forma en que se organiza el Estado mexicano, y ahora con la reforma, se incluirá una cláusula que expresa que el pueblo de México no permitirá, bajo ninguna circunstancia, intervenciones que perjudiquen la integridad, independencia y soberanía de la nación.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, habla durante una rueda de prensa este jueves, en Palacio Nacional de la Ciudad de México (México). EFE/ Isaac Esquivel
Entre las acciones que estarían prohibidas por esta reforma se encuentran los «golpes de Estado», las injerencias en procesos electorales y cualquier violación al territorio mexicano, ya sea por tierra, agua, mar o espacio aéreo. Además, la reforma también establecería que cualquier tipo de intervención en investigaciones o persecuciones criminales realizadas por extranjeros deberá ser autorizada y colaborada expresamente por el Estado mexicano y en conformidad con las leyes mexicanas.
Fortalecimiento de la soberanía nacional ante presiones externas
La reforma también implica un cambio en el artículo 19 de la Constitución, que específicamente establece que cualquier extranjero que realice actividades ilegales relacionadas con injerencias externas, especialmente en lo que respecta a la intervención en asuntos internos de México, recibirá «la pena más severa posible». Además, la nueva disposición añade la prisión preventiva oficiosa para quienes cometan tales actos.
“Quede claro: no hay injerencismo, no hay violación a la soberanía», subrayó Sheinbaum, haciendo hincapié en que la reforma busca proteger la soberanía de México frente a las presiones internacionales, como las generadas por el reciente posicionamiento de Estados Unidos respecto a los carteles del narcotráfico. A pesar de la designación de los carteles de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación (CJNG), el del Golfo, el del Noreste, la Nueva Familia Michoacana y los Carteles Unidos como organizaciones terroristas por parte del Departamento de Estado estadounidense, Sheinbaum reafirmó que las acciones contra el narcotráfico se seguirán realizando de manera coordinada y colaborativa con Estados Unidos, pero siempre respetando la soberanía mexicana.
EFE/ Isaac Esquivel
Un mensaje de unidad y respeto por la soberanía
La presidenta de México insistió en que, a pesar de los esfuerzos conjuntos con Estados Unidos para combatir el crimen organizado que afecta a ambos países, México no permitirá que se vulneren sus derechos. «Ambos países queremos combatir a los grupos de delincuencia organizada que realizan actos ilegales en ambos países, y estamos trabajando muy bien en la coordinación, pero tenemos que garantizar que esto se haga bajo colaboración y coordinación, sin violar en ningún momento la soberanía de México», declaró Sheinbaum.
Este mensaje llega en un momento delicado para las relaciones entre México y Estados Unidos, sobre todo después de que el gobierno de Trump decidiera etiquetar a varios carteles mexicanos como organizaciones terroristas. Aunque la medida ha sido polémica, la mandataria mexicana subrayó que la cooperación bilateral en la lucha contra el narcotráfico y la delincuencia organizada continuará de manera respetuosa y sin comprometer la independencia de México.