Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, expresó de manera clara y contundente su rechazo hacia las redadas migratorias que se están llevando a cabo en Estados Unidos. En una conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum reiteró que el Gobierno mexicano está firme en su apoyo a los migrantes mexicanos en la Unión Americana, destacando que se cuentan con recursos como los consulados y una red de abogados disponibles para defender sus derechos.
«Estamos con nuestros paisanos en Estados Unidos», afirmó la mandataria, recordando a los migrantes mexicanos que pueden contar con la asistencia consular y con la red de abogados dispuestos a brindarles apoyo legal. Además, añadió que, en caso de que los migrantes decidan regresar a México, serán recibidos con los brazos abiertos.
Sheinbaum subrayó que el Gobierno mexicano no está de acuerdo con etiquetar a los migrantes como criminales y tampoco apoya las redadas migratorias que se están ejecutando en territorio estadounidense. En este sentido, manifestó que su Administración está comprometida con la defensa de los derechos de los mexicanos, no solo dentro de México, sino también fuera del país, en especial en Estados Unidos.
Redadas migratorias en EE. UU.
El rechazo de Sheinbaum a las redadas en Estados Unidos se da en un contexto reciente, donde el Gobierno de EE. UU. ha intensificado estas acciones. El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) informó que, el lunes 27 de enero, se registró un número récord de detenciones con 1,179 migrantes arrestados en un solo día. Esta cifra marcó un nuevo pico en las redadas, que forman parte de los esfuerzos de la Administración de Donald Trump para acelerar las detenciones y deportaciones de migrantes indocumentados.
Según datos proporcionados por NBC News, solo el 52% de los detenidos durante esas redadas fueron considerados como «arrestos criminales», lo que implica que estos migrantes tenían antecedentes penales o estaban involucrados en algún delito en su país de origen. Por otro lado, el resto de los detenidos eran migrantes sin antecedentes penales y que solo habían cruzado de manera ilegal la frontera.
El ICE ha venido compartiendo a diario los datos sobre las redadas y detenciones, lo que ha generado preocupación entre los defensores de los derechos de los migrantes. Tom Homan, quien fue el encargado de la política migratoria de la Administración Trump, ha declarado su intención de seguir acelerando estos operativos.
La magnitud de las redadas
El número de detenciones en EE. UU. ha oscilado entre 400 y 593 personas por día durante la última semana, aunque la cifra alcanzó un pico de más de 950 el pasado domingo. Estos operativos se están llevando a cabo con un enfoque particular: las autoridades migratorias planean centrar sus esfuerzos en tres ciudades diferentes cada semana, con el objetivo de arrestar al menos a 1,200 migrantes diarios.
Desde la toma de posesión de Donald Trump como presidente de EE. UU., el 20 de enero, las autoridades estadounidenses han detenido a más de 4,000 inmigrantes en varias redadas. Esto forma parte de un esfuerzo más amplio del Gobierno estadounidense para intensificar las políticas de control migratorio, en línea con las promesas de Trump de endurecer la política migratoria y acelerar los procesos de deportación.
A medida que avanzan estas redadas, se mantiene la tensión sobre el trato de los migrantes detenidos, especialmente cuando muchos de ellos no tienen antecedentes penales o han vivido durante años en EE. UU. sin problemas legales significativos.
El debate sobre las redadas migratorias en Estados Unidos sigue siendo un tema polémico, con diversas opiniones sobre su eficacia y el impacto en las comunidades migrantes. Mientras tanto, el Gobierno de México sigue defendiendo a sus ciudadanos y buscando maneras de ofrecerles apoyo frente a las políticas migratorias de su vecino del norte.