Marcelo Ebrard, próximo secretario de Economía del Gobierno de México, respondió al embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, quien externó su preocupación por la Reforma al Poder Judicial.
En un mensaje desde Cuernavaca, Morelos, Ebrard señaló que la reforma no tiene por qué poner en peligro la relación comercial bilateral, ni el T-MEC.
“El T-MEC es el mejor negocio entre México, Estados Unidos y Canadá con todas las cifras que hay. No tiene por qué ponerlo en peligro, que no nos amenacen con eso”, aseveró.
El excanciller rechazó que esta modificación ponga en tela de juicio o riesgo la democracia pues, aseguró, cuando Estados Unidos empezó, dicho sistema de elección de jueces por voto popular ha servido para fortalecer la democracia.
¿Cómo puedes decir que eso va a poner en tela de juicio o el riesgo la democracia, cuando en Estados Unidos empezó en 1830 y ha servido para fortalecer la democracia norteamericana?, señaló.
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, aclaró que las preocupaciones que externó sobre la elección de jueces por voto popular “son en espíritu de colaboración”.
A propósito de sus declaraciones ante la eventual reforma al Poder Judicial, el diplomático reiteró que como socio, Estados Unidos busca un diálogo honesto y abierto en aras del progreso democrático y económico alcanzado.
«La comunicación es crucial, especialmente cuando se trata de nuestras metas comunes en seguridad y nuestras relaciones comerciales”, destacó.
Ken Salazar se dijo con “la mayor disposición” de dialogar con el liderazgo de México e intercambiar opiniones sobre los distintos modelos de elección de jueces.
El pronunciamiento del embajador estadounidense ocurre después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador calificara de “desafortunada e imprudente” su declaración sobre la reforma judicial.
«Ya se hizo una nota diplomática, un extrañamiento para la Embajada y se las vamos a entregar, yo espero que esto no se repita”, dijo el primer mandatario en su conferencia matutina.
De acuerdo con el embajador Salazar, la elección directa de jueces amenaza la histórica relación comercial entre ambas naciones, la cual depende de la confianza de los inversionistas en el marco legal de México.