El fondo, aprobado por el Congreso de la Unión en abril, causa polémica porque el 59 % de sus recursos iniciales, 24.238,5 millones de pesos (1.325,2 millones de dólares), proviene de cuentas no reclamadas de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), el sistema privado de pensiones.
Pero el gobernante mexicano López Obrador argumentó que su medida corrige las reformas de los Gobiernos de Ernesto Zedillo (1994-2000) y de Felipe Calderón (2006-2012) que derivaron en el sistema actual de pensiones privadas inspiradas en el modelo de Chile y que, según el mandatario, solo permitían una jubilación del 30 % del salario.
El límite de la nueva reforma será el salario promedio de los afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que en 2023 fue de 16.777 pesos (917,28 dólares).
“Es lo que estamos ahora resolviendo a partir del día de hoy para que el trabajador reciba el 100 % de su salario, es un avance importantísimo que se logra”, manifestó el mandatario.
Un sistema de jubilaciones mixto para México
La secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, explicó que se pasa “de un sistema individual de cuentas individuales a uno mixto, donde están las cuentas individuales, pero hay un complemento solidario para garantizar que los trabajadores puedan jubilarse con el 100 % de su salario”.
“Vamos a hacer entrega de los primeros complementos del Fondo de Pensiones para el Bienestar, ya una realidad en nuestro país, esta reforma importantísima que pretende eliminar estos efectos negativos que tuvieron las reformas neoliberales que nos llevaron a pensiones muy bajas”, mencionó.
Además de las Afores, el fondo se financiará con recursos incautados al crimen organizado o a políticos corruptos por el Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado (Indep), la liquidación del ente público Financiera Rural, y adeudos de entes púbicos al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
El Banco de México administrará el fondo, que también recibirá recursos de empresas del Estado operadas por las Fuerzas Armadas, como el Tren Maya y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).