Los gobiernos de los estados fronterizos de México con Estados Unidos, bajo las instrucciones de la administración de Claudia Sheinbaum, están tomando medidas para enfrentar una posible deportación masiva de migrantes, que afectaría principalmente a connacionales y personas de diversas nacionalidades, sobre todo de Latinoamérica. Esta situación surge con la entrada en vigor de la política antinmigrante del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Preparativos en Baja California para recibir a migrantes deportados
La gobernadora de Baja California, María del Pilar Ávila Olmeda, en conjunto con su secretario de gobierno, Alfredo Álvarez Cárdenas, sostuvo una reunión con autoridades estadounidenses con el objetivo de reforzar la atención a los migrantes retornados. Según Ávila Olmeda, en la región ya se tiene un plan para garantizar un trato digno y respetuoso de los derechos humanos de aquellos que sean deportados.
La gobernadora también destacó que, debido a la reciente cancelación del CBP One, unas 150 personas migrantes se han visto directamente afectadas. Ávila Olmeda aseguró que quienes lo necesiten recibirán el apoyo necesario para regresar al sur de México o a su país de origen, gracias a la coordinación con el Instituto Nacional de Migración.
En este contexto, el municipio fronterizo de Tijuana se declaró en estado de emergencia provisional, preparándose para enfrentar lo que podría ser una gran ola de deportaciones. Las autoridades de Baja California han tomado la iniciativa de garantizar que la infraestructura local esté lista para asistir a los migrantes que lleguen.
Migrantes esperan en el puente Internacional Paso del Norte, en Ciudad Juárez (México), el 20 de enero de 2025. EFE/ Luis Torres
Sonora y su estrategia para enfrentar la crisis migrante
Sonora, estado que atraviesa una situación de violencia debido a los enfrentamientos de las facciones del Cártel de Sinaloa, también ha preparado un plan para recibir a los migrantes deportados. El secretario de Gobierno de Sonora, Adolfo Salazar Raz, explicó que, gracias a una coordinación con autoridades locales y federales, se está reforzando la infraestructura básica en municipios como San Luis Río Colorado, Nogales, Agua Prieta y Hermosillo.
Salazar Raz detalló que ya se han habilitado espacios con servicios de internet, agua potable, energía eléctrica y suministros básicos como colchones y literas. Además, la Secretaría de la Defensa Nacional ha sido designada para brindar apoyo con alimentos, asegurando que los migrantes reciban lo que necesitan en su tránsito hacia otras partes de México o su regreso a sus países de origen.
Chihuahua: Preparativos en la frontera de El Paso y Ciudad Juárez
En Chihuahua, específicamente en la frontera entre El Paso (Texas) y Ciudad Juárez (México), el gobierno estatal ha comenzado a instalar carpas para recibir a los migrantes deportados. Este punto fronterizo es uno de los más importantes y transitados de toda la región. La instalación de las carpas está en marcha en el lugar conocido como «El Punto», donde en 2016, el Papa Francisco ofreció una misa binacional.
El gobierno de Chihuahua sigue las instrucciones de Claudia Sheinbaum, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, para garantizar que los migrantes deportados tengan acceso a servicios básicos. La medida también busca asegurar que las condiciones de acogida sean lo más humanitarias posibles, dado que este es uno de los cruces más importantes para los migrantes.
Migrantes permanecen varados, el 20 de enero de 2025, en el puerto fronterizo de El Chaparral, en Tijuana (México). EFE/ Joebeth Terríquez
Coahuila y Nuevo León en alerta ante la posible deportación masiva
El gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez, informó que su estado está listo para recibir a los migrantes deportados, con el establecimiento de cuatro centros logísticos en la región norte, la zona carbonífera y el centro del estado. Estos centros están destinados a ofrecer albergue y asistencia, aunque aún se espera que el gobierno federal se encargue de equiparlos y proporcionar el transporte necesario para el traslado de las personas deportadas.
Por su parte, en Nuevo León, el gobierno local ha declarado alerta debido a la entrada en vigor de la enmienda que busca hacer deportaciones masivas desde Estados Unidos. El secretario general de Gobierno, Javier Navarro, aseguró que, en caso de que se materialice la deportación masiva, el estado está preparado para recibir a los connacionales que sean deportados y ofrecerles apoyo adecuado.
Tamaulipas: Listo para recibir a los migrantes deportados
Tamaulipas, el último estado fronterizo al este de México, se ha mostrado confiado en su capacidad para manejar la posible deportación de hasta 250,000 migrantes provenientes de Estados Unidos. El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, destacó que el estado cuenta con infraestructura escalable, lo que le permitirá hacer frente al flujo migratorio que se podría presentar debido a las políticas migratorias de Donald Trump.
Villarreal Anaya también comentó que la administración estatal se encuentra atendiendo a cerca de 1,400 personas que aún esperan respuesta a sus trámites migratorios. Esto refleja la situación compleja y la necesidad de establecer soluciones para las personas migrantes en todo el país.