La ciudad de Tapachula, ubicada en la frontera sur de México, se ha convertido en un refugio para miles de migrantes que quedaron varados debido a las restricciones impuestas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Muchos de estos migrantes, provenientes de Centroamérica y otras partes del mundo, han encontrado empleo temporal en la ciudad gracias a un programa de asistencia humanitaria gestionado por los gobiernos federal y estatal de Chiapas, para integrarlos a las cuadrillas municipales y ayudar a embellecer la urbe.
Tapachula, el centro de recepción para migrantes en México
Con su ubicación estratégica en la frontera sur, Tapachula es el principal punto de entrada para migrantes en México. La ciudad, que recibe a más extranjeros que cualquier otra del país, ha sido testigo de un aumento en el número de personas que buscan refugio, especialmente después de que las políticas migratorias de Trump endurecieran las condiciones para acceder a los Estados Unidos.
Los migrantes que llegaron a Tapachula trabajan bajo un programa que les permite obtener empleo para cubrir sus necesidades básicas mientras esperan la resolución de sus trámites migratorios ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar). A pesar de las dificultades, muchos han encontrado en México una opción de vida más estable que la que vivían en sus países de origen.
Migrantes descansan en las principales plazas de Tapachula, en el estado de Chiapas (México). EFE/Juan Manuel Blanco
Carlos, un migrante LGBTI que busca una vida mejor en México
Uno de los migrantes que ha encontrado empleo en Tapachula es Carlos, un joven cubano de la comunidad LGBTI que huyó de su país debido a la discriminación por su orientación sexual. Carlos expresa que el gobierno mexicano ha sido receptivo y ha respetado sus derechos humanos, algo que no sucedía en su tierra natal. «Yo no lo pienso tanto porque el simple hecho de colaborar aquí me ayuda tanto», comentó Carlos, quien ahora trabaja en la limpieza de las calles de Tapachula como parte del programa municipal de empleo para migrantes.
El hecho de que México ofrezca opciones de trabajo y una mejora en las condiciones de vida ha permitido que muchos migrantes, como Carlos, vean en este país una oportunidad para rehacer sus vidas lejos de la violencia, la discriminación y la falta de oportunidades.
La situación de los migrantes varados por las políticas de Trump
La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y sus políticas migratorias más restrictivas, como la deportación masiva y el cierre de la frontera, han tenido un impacto directo sobre los migrantes en la frontera sur de México. Desde el 20 de enero de este año, miles de migrantes han quedado varados en Tapachula debido a que sus solicitudes de asilo o refugio no han sido procesadas a tiempo. La implementación de la aplicación ‘CBP One’ de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CPB) también ha complicado aún más el proceso para quienes intentan llegar a Estados Unidos.
Para muchos, la frontera norte de México representa una esperanza de encontrar un futuro mejor, pero las políticas de Trump han cerrado esa puerta de manera abrupta. En este contexto, algunos migrantes se han visto forzados a quedarse en México, buscando trabajo para poder mantenerse mientras esperan una resolución sobre su estatus migratorio.
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Migrantes juegan en las principales plazas de Tapachula este viernes, en el estado de Chiapas (México). EFE/Juan Manuel Blanco
El Gobierno mexicano promete asistencia humanitaria
El gobierno de México ha respondido a esta situación ofreciendo asistencia humanitaria a los migrantes. Según la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, el país ha recibido a más de 10,000 migrantes deportados por la Administración de Trump desde enero de 2025. Además, Sheinbaum ha asegurado que el gobierno ofrece la posibilidad de retornar a los migrantes a sus países de origen de manera voluntaria.
El retorno es completamente voluntario, y el gobierno mexicano ha habilitado vuelos y transporte terrestre para aquellos que decidan regresar a su país. Sin embargo, para quienes deciden quedarse, el gobierno mexicano les ofrece programas de asistencia y empleo temporal, como los que se implementan en Tapachula.
La falta de recursos y la saturación de la Comar
Uno de los mayores desafíos para los migrantes en Tapachula es la saturación de las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), que se encargan de procesar las solicitudes de asilo. Los trámites son lentos y, en muchos casos, los migrantes deben esperar durante meses o incluso más tiempo para obtener una respuesta. En este sentido, muchos piden que se agilicen los procesos y que se ofrezcan soluciones más rápidas y eficientes.
Adán Antonio, un salvadoreño que también se encuentra en Tapachula, expresa su frustración por la lentitud del proceso: «Las oficinas están saturadas por extranjeros que buscan quedarse en México después del regreso de Trump a la Casa Blanca. Es necesario que agilicen los procesos de asilo y que se haga de manera más ordenada».
EFE/ Juan Manuel Blanco
Los migrantes ven a México como una opción de vida
A pesar de los desafíos, los migrantes en Tapachula comienzan a ver a México como una opción viable para rehacer sus vidas. El haitiano Visal Yamal, por ejemplo, considera que el programa de empleo temporal implementado en Tapachula ha sido fundamental para su supervivencia. «El Gobierno de aquí nos hizo caso con ese programa. Gracias a los gobiernos, a la presidenta de México, porque nos están ayudando con los papeles», comentó Yamal, quien asegura que no tiene planes de regresar a Haití debido a la inseguridad que enfrenta en su país de origen.
Para muchos, como Carlos y Visal, la oportunidad de trabajar y tener acceso a asistencia humanitaria en México se ha convertido en una oportunidad de vida ante la imposibilidad de cruzar la frontera con Estados Unidos.
Chiapas y México: lugares hospitalarios para migrantes
Funcionarios locales en Tapachula defienden que Chiapas y México son lugares «hospitalarios» donde no se discrimina ni criminaliza a los migrantes, sino que se les reconoce como personas que buscan un mejor futuro. Sin embargo, la situación sigue siendo compleja, ya que el número de migrantes continúa aumentando y las condiciones de vida siguen siendo difíciles para aquellos que se quedan esperando la resolución de sus trámites.