Estudiantes de universidades de Oaxaca protestaron en el Congreso estatal para exigir la renuncia del presidente municipal de Santa Lucía del Camino, Juan Carlos García Márquez, tras la muerte del joven Diego Ignacio Paz, quien fue golpeado y baleado por policías municipales cuando realizaban un operativo de alcoholímetro el pasado 31 de agosto.
Los manifestantes advirtieron que el otro estudiante que acompañaba ese día a Diego, José Rosas, está en peligro de morir debido a que tiene traumatismo de cráneo, dos costillas rotas y está a punto de perder un ojo, por los golpes que recibió de los policías municipales.
El ataque a los jóvenes ocurrió la madrugada del sábado pasado en la avenida Lázaro Cárdenas, frente al Cbtis 123, donde se instaló un operativo alcoholímetro, según la versión de la policía municipal, Diego Ignacio Paz aceleró el vehículo que conducía y atropelló a un elemento, que supuestamente se encuentra grave, aunque no se ha revelado su identidad ni el parte médico. Los manifestantes afirman que ni siquiera hay algún uniformado lesionado.
Debido a esto, según el parte oficial, los jóvenes huyeron del lugar y más tarde, al perder el control del vehículo escaparon a pie, y en la persecución, los policías dispararon contra los universitarios e hirieron a Diego Ignacio Paz, por lo cual, los oficiales aún golpearon a ambos estudiantes hasta percatarse de que Diego tenía una herida de bala, a quien una ambulancia trasladó a un hospital, donde murió más tarde.
Mientras que el otro joven fue llevado directamente a Fiscalía General, de donde lo trasladaron a un hospital ante la gravedad de las lesiones que sufrió.
El caso de brutalidad policiaca originó que los compañeros universitarios de ambos jóvenes protestaran con gritos y pancartas en el funeral y sepultura de Diego Ignacio, para exigir justicia.
Ayer familiares y amigos realizaron otra marcha de protesta que partió del lugar en el que se instaló el alcoholímetro hasta el palacio municipal de Santa Lucía del Camino, donde pintaron consignas en exigencia de justicia y la división del alcalde local, afiliado a Morena.
Este miércoles, por tercer día consecutivo, estudiantes de la Universidad Anáhuac, quienes eran compañeros de Diego Ignacio Paz, así como jóvenes de otras universidades se unieron a la protesta.
Los manifestantes arribaron a las instalaciones del Congreso de Oaxaca, cuyas puertas fueron cerradas. En un mitin, los jóvenes exigieron la consignación de todos los policías involucrados, así como del edil Juan Carlos García Márquez, por encubrir los hechos.
El lunes pasado -dos días después del ataque a los jóvenes- el gobernador Salomón Jara ordenó el cese de los policías involucrados y el castigo a los mismos. Además, ordenó investigar al director de la corporación, Marcos Fredy López Hernández, quien renunció al cargo para tratar de evadir responsabilidades.