Venezuela acusa de «robo descarado» de avión a EE. UU.
La Administración de Nicolás Maduro calificó de «robo descarado» la confiscación de un avión propiedad de Venezuela por parte del gobierno de Estados Unidos. Este incidente ocurrió en la República Dominicana, y fue llevado a cabo debido a supuestas violaciones a las leyes de control de exportaciones y las sanciones impuestas por EE. UU.
En un comunicado publicado el 7 de febrero de 2025 en Telegram, la Cancillería de Venezuela condenó este acto y acusó al secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, de ser el responsable directo de la acción. “Venezuela denuncia ante el mundo el robo descarado de una aeronave propiedad de la nación venezolana, ejecutado por orden de Marco Rubio”, expresó el gobierno venezolano.
Venezuela tomará todas las «acciones necesarias»
El gobierno de Venezuela dejó claro que tomará todas las «acciones necesarias» para denunciar este «robo» y exigir la devolución inmediata de la aeronave. La Cancillería calificó a Rubio de «delincuente disfrazado de político» y lo acusó de usar su cargo para despojar al país de sus bienes. En sus declaraciones, también afirmó que el secretario de Estado de EE. UU. “pasará a la historia como un ladrón y enemigo declarado de nuestro pueblo”.
Incautación de la aeronave por presuntas violaciones
La confiscación del avión venezolano tuvo lugar el jueves, cuando Estados Unidos confiscó la aeronave, que se encontraba estacionada en un hangar del aeropuerto de Santo Domingo. La incautación se produjo bajo la acusación de que el avión violaba las leyes de control de exportaciones y las sanciones impuestas por Estados Unidos. Este es el segundo avión de Venezuela incautado en los últimos cinco meses por parte de las autoridades estadounidenses.
El avión, un Dassault Falcon 2000EX, estaba vinculado a la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PdVSA), que también se encuentra bajo sanciones estadounidenses. Según el Departamento de Justicia de EE. UU., el avión fue adquirido en 2017 por PdVSA en EE. UU. y exportado a Venezuela, donde fue utilizado para actividades relacionadas con el lavado de dinero y la evasión de las sanciones.
La acusación de lavado de dinero y evasión de sanciones
El gobierno estadounidense argumenta que la aeronave fue utilizada para evadir las sanciones y que el mantenimiento de la misma incluyó piezas provenientes de EE. UU., lo cual violaría las restricciones impuestas por Washington. Además, Rubio, quien se encontraba de visita en República Dominicana cuando ocurrió la incautación, publicó en redes sociales que la aeronave se usaba para actividades ilegales, incluyendo la evasión de las sanciones y el lavado de dinero.
Este avión se une a otro que fue confiscado en septiembre de 2024, también en República Dominicana. En esa ocasión, las autoridades estadounidenses denunciaron que la aeronave fue adquirida ilegalmente por 13 millones de dólares a través de una empresa fantasma y que había sido contrabandeada desde EE. UU. para ser utilizada por Nicolás Maduro y sus aliados.
La relación entre Venezuela y EE. UU. en el contexto de las sanciones
Este episodio de la confiscación de aeronaves es solo una muestra de las crecientes tensiones entre Venezuela y Estados Unidos. Desde la llegada de Maduro al poder, el gobierno venezolano ha sido objeto de numerosas sanciones por parte de Washington, las cuales buscan presionar al régimen para que ceda en varias áreas, incluyendo la política interna y su relación con otras naciones. A lo largo de los años, la administración de Maduro ha respondido a las sanciones de manera firme, acusando a EE. UU. de interferir en los asuntos internos de Venezuela y de intentar despojar al país de sus recursos.
La acusación de «robo descarado» no es la primera vez que Venezuela emite declaraciones fuertes en contra de la política exterior de Estados Unidos, pero la confiscación de aeronaves de su propiedad ha generado una reacción aún más enérgica, dado el impacto directo que estas acciones tienen sobre los recursos materiales y la soberanía del país.
Impacto en las relaciones diplomáticas entre Venezuela y EE. UU.
Este incidente también marca un nuevo episodio en las deterioradas relaciones diplomáticas entre Venezuela y Estados Unidos. Las tensiones entre ambos países no han cesado desde hace años, y cada nuevo enfrentamiento en el ámbito internacional parece alimentar aún más la animosidad entre los dos gobiernos. A medida que continúan los enfrentamientos y las sanciones, tanto Venezuela como EE. UU. siguen adoptando posturas extremas frente a las acusaciones y las acciones del otro, lo que complica aún más la posibilidad de un diálogo constructivo.