El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, reveló este miércoles que no descarta la posibilidad de renunciar a su cargo en julio próximo para postularse a diputado en las elecciones de febrero de 2026. Esta decisión podría marcar un hito en la política costarricense, ya que sería la primera vez en la historia del país que un presidente renuncia para aspirar a un puesto en el Congreso. Durante una conferencia de prensa, Chaves abordó el tema de forma directa y sin ambigüedades.
El mandatario respondió con firmeza cuando un periodista le preguntó sobre la posibilidad de renunciar a su cargo: «Lo más seguro es que quién sabe, ahí vamos a pensarlo y veremos. Yo no veo por qué tiemblan». Aunque no confirmó ni descartó la opción, aseguró que, si tomara la decisión, la renuncia sería totalmente legal y constitucional. Además, dejó claro que su principal motivación sería asumir la presidencia de la Asamblea Legislativa, algo que consideraría viable dado que podría obtener el respaldo de una amplia mayoría en el Congreso.
Reacciones políticas ante la posible renuncia de Chaves
El anuncio de Chaves ha generado diversas reacciones en el ámbito político costarricense. Por un lado, algunos sectores respaldan la idea de que el presidente pueda postularse al Congreso, mientras que otros critican la posible renuncia por considerarla un intento de evadir responsabilidades o de protegerse frente a posibles procesos judiciales.
Pilar Cisneros, diputada oficialista y cercana colaboradora de Chaves, dejó abierta la posibilidad de que el mandatario renuncie durante una entrevista en Extra Radio. Según Cisneros, la opción de renunciar sería parte de su estrategia para aplicar reformas profundas al país, principalmente en el ámbito legislativo, donde ha sostenido que se necesita una mayor estabilidad política para implementar cambios sustanciales.
Por otro lado, la oposición ha sido más crítica respecto a las intenciones del presidente. Óscar Izquierdo, jefe de la bancada del Partido Liberación Nacional, consideró que la decisión de Chaves podría estar motivada por el deseo de «no perder su inmunidad» ante los procesos judiciales que enfrenta en su contra. La Fiscalía está investigando al mandatario por varios casos que aún están abiertos.
Elí Feinzaig, diputado del Partido Liberal Progresista, también cuestionó las declaraciones de Chaves, señalando que este tipo de anuncios son parte de una «estrategia para desviar la atención de los problemas reales que enfrenta el país», en particular los relacionados con la seguridad. Además, otros diputados, como Luis Diego Vargas, han calificado de «irresponsable» la postura del presidente.
SHAWN THEW / POOL (EFE)
Contexto constitucional sobre la renuncia presidencial en Costa Rica
La Constitución Política de Costa Rica establece varias limitaciones para el presidente en cuanto a su continuidad en el cargo y sus posibilidades de postulación en otros cargos. El artículo 109 de la Constitución menciona que el presidente de la República no puede postularse como diputado o ser inscrito como candidato para esta función si se encuentra ejerciendo su mandato. La norma establece que los titulares del poder ejecutivo no pueden ser elegidos diputados ni ser candidatos para esa función dentro de los seis meses anteriores a la fecha de las elecciones.
Esto significa que, si Chaves decide renunciar, lo haría dentro de los plazos estipulados por la Constitución, lo que permitiría que su candidatura como diputado fuera legal. Sin embargo, la renuncia debe ser formalmente aceptada por la Asamblea Legislativa, según lo que establece la misma Carta Magna. De tomarse esta decisión, Costa Rica vería una situación inédita en su historia política, ya que nunca un presidente había renunciado para postularse a un cargo legislativo.
Este tipo de escenario también refleja el escenario político fragmentado que vive Costa Rica, donde los partidos políticos no tienen mayorías claras y existe un fraccionamiento legislativo que ha dificultado la aplicación de reformas importantes en las últimas décadas. Chaves, quien ha criticado a los partidos tradicionales y ha manifestado su deseo de impulsar una nueva Constitución, considera que un Congreso con una mayoría dominante de diputados sería fundamental para llevar a cabo las reformas que él considera necesarias para el país.
La carrera presidencial de 2026 y el futuro político de Chaves
Las elecciones presidenciales de Costa Rica están programadas para el 1 de febrero de 2026, y durante esa jornada los costarricenses elegirán no solo al nuevo presidente, sino también a los 57 diputados que integrarán la Asamblea Legislativa. En este contexto, la posible renuncia de Chaves para postularse a un cargo legislativo abre interrogantes sobre su futuro político y las implicaciones para su partido, la República.
Si bien Chaves no ha dado detalles definitivos sobre su futuro político, ha dejado claro que, en caso de renunciar, su objetivo sería liderar un Congreso con una fuerte mayoría, lo que podría permitirle implementar reformas clave que, según él, son necesarias para el país. Esta postura pone en evidencia su desacuerdo con el sistema actual y su visión de un cambio profundo en la estructura política y legislativa de Costa Rica.