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El Gobierno de Perú anunció este lunes nuevas medidas de seguridad en respuesta a un atentado con explosivos en la sede de la Fiscalía de Trujillo, la tercera ciudad más grande del país. Entre las acciones más destacadas se encuentran el aumento de la presencia de militares en la ciudad y la implementación de protección para los jueces y fiscales que investigan a sospechosos del crimen organizado en el norte del país.
Medidas de seguridad tras atentado en Trujillo
El presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, informó desde Trujillo que, en respuesta a la sugerencia de la presidenta de la Corte Superior de Justicia de La Libertad, se brindará seguridad adicional a los jueces y fiscales que trabajan en casos relacionados con el crimen organizado en la región. Esta medida surge después de un atentado con explosivos ocurrido en la madrugada de este lunes, que afectó a la sede de la Fiscalía en Trujillo, un suceso que ha generado gran preocupación por la seguridad de los funcionarios encargados de llevar adelante las investigaciones.
Adrianzén explicó que, tras el ataque, una de las fiscales que investiga organizaciones criminales en Trujillo recibió un mensaje amenazante, lo que ha motivado al Gobierno a proporcionar resguardo a todos los jueces y fiscales que desempeñan funciones relacionadas con el crimen organizado en la región.
Foto de archivo del primer ministro, Gustavo Adrianzén. EFE/ Paolo Aguilar
Duplicación de la presencia militar en Trujillo
Una de las acciones más inmediatas adoptadas por el Gobierno peruano ha sido la duplicación de la presencia de fuerzas armadas en Trujillo. El ministro de Defensa, Walter Astudillo, señaló que se han enviado más efectivos de las fuerzas especiales para garantizar la seguridad en la ciudad y proteger los activos nacionales. Esta medida busca asegurar que la violencia y los actos criminales no sigan escalando en una de las ciudades más afectadas por las actividades del crimen organizado en el norte del país.
Astudillo enfatizó la respuesta contundente del Gobierno ante lo que calificó como una situación intolerable. «La respuesta es inmediata y contundente ante una situación que no se puede tolerar», comentó el ministro de Defensa. La presencia de fuerzas armadas y de policía será clave para frenar el auge de la violencia y la delincuencia en la región.
Acciones contra el crimen organizado en el norte de Perú
El Gobierno también ha dispuesto otras medidas para contrarrestar las actividades de las bandas criminales en Trujillo y la región de La Libertad. El ministro del Interior, Juan José Santiváñez, indicó que se realizarán cambios en la Policía Nacional para asegurar que los agentes encargados de la lucha contra las organizaciones criminales no tengan vínculos con ellas. En total, se trasladarán 100 policías de la zona que puedan estar implicados con el crimen organizado.
Además, se ha dispuesto el traslado de varios sospechosos de dirigir bandas de sicarios y extorsionadores desde las cárceles comunes al penal de máxima seguridad de Challapalca, ubicado a casi 5.000 metros sobre el nivel del mar, en el departamento de Tacna. Esta medida tiene como objetivo evitar que los delincuentes sigan operando desde dentro de las prisiones.
Integrantes de la Policía Nacional de Perú (PNP) vigilan a una persona detenida en Lima (Perú), en una fotografía de archivo. EFE/Connie Calderón
Emergencia en La Libertad ante el auge del crimen
La región de La Libertad, donde se encuentra Trujillo, está declarada en emergencia desde hace varios meses debido al incremento de la delincuencia común y el crimen organizado. En particular, las actividades criminales en la zona están relacionadas con la minería ilegal de oro, el sicariato y la extorsión. El Gobierno ha puesto en marcha una serie de acciones para enfrentar estas redes delictivas, pero los atentados y las amenazas a las autoridades judiciales y policiales indican que la situación sigue siendo grave.
Condena al ataque terrorista
El Gobierno peruano condenó enérgicamente el atentado ocurrido en la madrugada de este lunes, que dejó a dos personas heridas y causó daños materiales en la sede de la Fiscalía de Trujillo. Según el Ministerio del Interior, el ataque es una «respuesta criminal» de las organizaciones delictivas ante la lucha que el Gobierno ha emprendido contra las redes de crimen organizado en la región.
El presidente de la República, a través de un comunicado oficial, también reiteró su compromiso con la seguridad de los ciudadanos y el fortalecimiento de las instituciones encargadas de impartir justicia en el país. Además, resaltó la importancia de mantener la unidad frente a los desafíos que enfrenta el país en términos de seguridad.
