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Las autoridades peruanas están investigando el asesinato del excongresista Óscar Medelius, quien fue abatido a tiros en Lima el lunes por la mañana. Según las primeras informaciones, la hipótesis que cobra fuerza es que se trató de un ajuste de cuentas vinculado a su pasado como abogado de organizaciones criminales.
El ajuste de cuentas de Óscar Medelius
El ministro del Interior de Perú, Juan José Santiváñez, expresó que las características del crimen apuntan a un ajuste de cuentas. «De las primeras informaciones hemos podido deducir por la forma en que se ha llevado a cabo, que definitivamente es un ajuste de cuentas», comentó Santiváñez en una rueda de prensa, refiriéndose al asesinato ocurrido el lunes en el distrito limeño de Carabayllo.
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Medelius, de 69 años, fue asesinado junto a otra persona mientras viajaban en una camioneta. Testigos informaron que dos personas en una motocicleta interceptaron el vehículo y dispararon alrededor de 20 veces, lo que incrementa las sospechas sobre la naturaleza del crimen.
El vínculo de Medelius con organizaciones criminales
El excongresista fue abogado de la organización criminal ‘Barrio King’, liderada por Gerson Aldair Gálvez Calle, alias ‘Caracol’. Este último cumple actualmente una condena de 35 años de prisión por varios delitos, incluyendo sicariato, narcotráfico y extorsión. Medelius también fue investigado por su relación con organizaciones criminales, lo que ha llevado a las autoridades a considerar la conexión entre su asesinato y sus vínculos delictivos.
El hecho de que Medelius estuviera involucrado con ‘Caracol’ y el grupo criminal ha llevado a la Policía Nacional del Perú a explorar la hipótesis del ajuste de cuentas, ya que el crimen parece estar vinculado a las disputas internas dentro del mundo del crimen organizado. Además, a finales de diciembre, Gálvez fue sentenciado a 10 años de prisión por la posesión ilegal de un celular desde el que coordinaba operaciones de narcotráfico.
Foto: ANDINA
El pasado de Medelius: implicación en el caso Fujimori
Medelius no solo estuvo relacionado con actividades delictivas contemporáneas, sino también con eventos históricos políticos que marcaron la historia reciente de Perú. A fines de la década de 1990, Medelius fue parte de un escándalo político que implicó la falsificación de firmas para la inscripción de la agrupación fujimorista «Vamos Vecino», que buscaba la reelección de Alberto Fujimori en el año 2000.
Tras ser extraditado de Estados Unidos en 2006, Medelius fue condenado en 2008 a ocho años de prisión por su participación en esta falsificación masiva de firmas, que había sido ordenada por el exasesor presidencial Vladimiro Montesinos, con el objetivo de garantizar la segunda reelección del entonces presidente Fujimori.
En el marco de las investigaciones de ese caso, Medelius también fue captado en uno de los «Vladivideos», grabaciones secretas realizadas por Montesinos, donde se le veía recibiendo dinero del exasesor presidencial. Esto puso de manifiesto la compleja red de corrupción que caracterizaba el entorno político y económico de los últimos años del gobierno de Fujimori.
La hipótesis de un ajuste de cuentas ligado al crimen organizado
La teoría del ajuste de cuentas en el asesinato de Medelius no solo está relacionada con su implicación en el mundo político de los 2000s, sino también con su vinculación en el ámbito del crimen organizado. Los investigadores están tomando en cuenta las conexiones de Medelius con el líder de la banda ‘Barrio King’, así como los posibles conflictos con otras organizaciones criminales que pudieran haber desencadenado su asesinato.
Foto: Difusión
Los detectives que investigan el crimen continúan interrogando a testigos y recolectando pruebas que puedan ayudar a esclarecer las razones detrás del asesinato. El hecho de que Medelius fuera una figura vinculada tanto al crimen organizado como a la política ha abierto una serie de hipótesis que podrían arrojar nuevos detalles sobre las causas del ataque.
Medelius y el legado de la corrupción en Perú
El asesinato de Óscar Medelius también resalta la persistencia de la corrupción y el crimen organizado en Perú, elementos que han marcado la política y las relaciones de poder en el país a lo largo de las décadas. La corrupción dentro del gobierno fujimorista, combinada con las conexiones de Medelius con el crimen organizado, crea un panorama complicado que sigue afectando al país.
A pesar de las condenas y el trabajo de las autoridades peruanas para erradicar estos delitos, las investigaciones sobre el asesinato de Medelius podrían arrojar más luz sobre cómo la política y el crimen organizado siguen entrelazados en el país.
