El presidente de Argentina, Javier Milei, y 18 de los 24 gobernadores provinciales firmaron la madrugada de este martes (09.07.2024) el Acta del Pacto de Mayo, un pacto propuesto en marzo pasado y que contiene compromisos en diez políticas «refundacionales» para el país suramericano.
La firma coincidió con el inicio del 9 de julio, día en que se celebra la Independencia argentina, declarada en 1816 en la ciudad de San Miguel de Tucumán (noroeste), precisamente el sitio elegido para este acto simbólico de unidad política, pues ninguno de los 18 gobernadores pertenecen al partido del mandatario, La Libertad Avanza (ultraderecha).
El objetivo de la firma del pacto es el de «sellar los acuerdos básicos para sacar a la Argentina adelante».
Los cinco primeros puntos son la inviolabilidad de la propiedad privada; el equilibrio fiscal innegociable; la reducción del gasto público a niveles históricos, en torno al 25 % del producto bruto interno; una educación inicial, primaria y secundaria «útil y moderna, con alfabetización plena y sin abandono escolar»; y una reforma tributaria «que reduzca la presión impositiva, simplifique la vida de los argentinos y promueva el comercio».
Asimismo, se establecen como puntos «la rediscusión de la coparticipación federal de impuestos para terminar para siempre con el modelo extorsivo actual que padecen las provincias» y «el compromiso de las provincias argentinas de avanzar en la explotación de los recursos naturales del país».
Proponen una reforma laboral moderna
El pacto se completa con el compromiso de hacer una reforma laboral moderna que promueva el trabajo formal; una reforma del sistema de jubilaciones «que le dé sostenibilidad al sistema y respete a quienes aportaron»; y la apertura al comercio internacional «de manera que la Argentina vuelva a ser protagonista del mercado global».
La firma se abrió con el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, al que sucedieron el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala; el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, y la secretaria general de Presidencia, Karina Milei.
Posteriormente, dejaron su rúbrica los gobernadores de Catamarca, Raúl Jalil; Chaco, Leandro Zdero; Chubut, Ignacio Torres, y el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri.
También los gobernadores de Córdoba, Martín Llaryora; Corrientes, Gustavo Valdés; Entre Ríos, Rogelio Frigerio; Jujuy, Carlos Sadir; Mendoza, Alfredo Cornejo; Misiones, Hugo Passalacqua; Neuquén, Rolando Figueroa; Río Negro, Alberto Weretilneck; Salta, Gustavo Sáenz; San Juan, Marcelo Orrego; San Luis, Claudio Poggi; Santa Fe, Maximiliano Pullaro; y Santiago del Estero, Gerardo Zamora.
Quienes no formaron parte de esta firma fueron los gobernadores Claudio Vidal (Santa Cruz), Ricardo Quintela (La Rioja), Axel Kicillof (provincia de Buenos Aires), Sergio Ziliotto (La Pampa), Gildo Insfrán (Formosa) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego).
La ceremonia de la firma estuvo cargada de simbolismo, ya que se llevó a cabo en el Salón de Jura de la Casa Histórica de la Provincia de Tucumán, en cuya mesa -sobre la que se firmó el Acta de Independencia de Argentina- estaba presente la Constitución Nacional original de 1853.