El encuentro tendrá lugar en la Casa Rosada, sede del Gobierno argentino, a pocos días del inicio de un nuevo mandato presidencial en Venezuela. Las fuentes no proporcionaron detalles adicionales sobre la reunión.
Por su parte, la Oficina de Comunicación y Prensa de González Urrutia informó en un comunicado que esta reunión marcará el inicio de una gira internacional del dirigente venezolano.
“El sábado 4 de enero, el presidente González Urrutia será recibido por el presidente de la República Argentina, Javier Milei, en la Casa Rosada”, detalla el comunicado, en el que se invita a la comunidad venezolana residente en Argentina a congregarse frente a la sede del Ejecutivo para apoyar al líder opositor.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela otorgó oficialmente la victoria de los comicios de julio a Maduro, un resultado que fue cuestionado por la coalición opositora Plataforma Unitaria Democrática (PUD) y diversos sectores de la comunidad internacional. González Urrutia ha asegurado que regresará a Venezuela para asumir la Presidencia el 10 de enero.
La posesión presidencial
Mientras tanto, Maduro, respaldado por instituciones como la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), también afirma que asumirá su nuevo mandato en la misma fecha. Paralelamente, la Policía venezolana ha ofrecido una recompensa de 100.000 dólares por información sobre el paradero de González Urrutia, quien se exilió en España en septiembre. El líder opositor enfrenta acusaciones de diversos delitos, entre ellos asociación para delinquir, legitimación de capitales y desconocimiento de las instituciones estatales.
Fotografía de archivo de Edmundo González Urrutia. EFE/EPA/Ronald Wittek
Las relaciones diplomáticas
El Gobierno de Milei reconoció a González Urrutia como vencedor de las elecciones presidenciales del 28 de julio y condenó los cargos penales en su contra. En contraste, el gobierno de Nicolás Maduro expulsó a los diplomáticos argentinos en Caracas, donde cinco dirigentes opositores venezolanos se encuentran refugiados.
Fotografía de archivo de los líderes opositores de Venezuela María Corina Machado (i) y Edmundo González Urrutia (d), durante el cierre de campaña electoral. EFE/Ronald Peña R.
La tensión entre ambos países aumentó el 8 de diciembre con la detención de Nahuel Gallo, un gendarme argentino que fue arrestado en un paso fronterizo con Colombia y acusado de conspiración, terrorismo y otros delitos. Según el Gobierno argentino, Gallo estaba en Venezuela para visitar a su familia, pero las autoridades venezolanas lo consideran parte de un plan contra la seguridad del Estado.
El Gobierno de Milei ha denunciado el caso ante la Corte Penal Internacional, calificando la detención de Gallo como una “desaparición forzada” y una violación grave de los derechos humanos, enmarcada en un patrón sistemático de crímenes de lesa humanidad en Venezuela.