Las lluvias que desde hace dos semanas afectan a Costa Rica han dejado tres personas fallecidas y cinco desparecidas, así como comunidades inundadas en las provincias de Guanacaste y Puntarenas, en el litoral Pacífico.
La tormenta Sara causa fuertes lluvias en Costa Rica
Una mujer camina por una calle inundada durante el paso de la tormenta tropical Sara, el 15 de noviembre de 2024 en La Ceiba (Honduras) © Esaú Ocampo / AFP
Así lo detalló este lunes la presidenta de la Cruz Roja costarricense, Dyanne Marenco, en un informe sobre la atención de la emergencia en las últimas dos semanas provocada por ondas tropicales y los efectos indirectos de las tormentas tropicales Rafael y Sara.
Marenco resaltó que las operaciones de búsqueda de desaparecidos y de atención humanitaria a los damnificados se mantienen activas aunque las lluvias han disminuido en las últimas horas.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) disminuyó este lunes las alertas de roja (máxima) a naranja (alta) para las provincias de Guanacaste y Puntarenas (Pacífico); de naranja a amarilla (intermedia) para el centro y el norte del país, y de amarilla a verde (preventiva) para la provincia de Limón (Caribe).
«Se reporta una disminución general de la saturación de los suelos, sin embargo, aún hay cuencas con saturación importante, principalmente en la zona montañosa norte, Guanacaste, zona sur y Valle Central», advirtió la CNE.
Pese a la mejora en las condiciones climáticas, comunidades de las provincias de Guanacaste y Puntarenas siguen afectadas por las inundaciones, por lo cual las autoridades continúan con las labores de entrega de ayuda humanitaria.
Hasta 3.057 personas llegaron a estar resguardadas en medio centenar de albergues, pero poco a poco están regresando a sus hogares.
El Gobierno de Costa Rica decreta emergencia nacional por fuertes lluvias
El pasado miércoles el Gobierno de Costa Rica decretó emergencia nacional con el fin de agilizar los procesos para atender la emergencia, la distribución de recursos económicos y humanos, las contrataciones para reconstrucción o habilitación de carreteras, entre otros temas.
Desde el martes un grupo de 300 rescatistas enviados por el Gobierno de El Salvador junto con cargamentos de ayuda humanitaria, colaboran en la atención de la emergencia.
La llegada de estos rescatistas ha generado polémica en el Congreso de Costa Rica, ya que entre ellos vienen militares salvadoreños, cuyo ingreso, según bancadas de oposición, debió ser aprobado por el Legislativo de acuerdo a la Constitución Política.
El Congreso aprobó por su cuenta el jueves una moción en la que agradeció a El Salvador la ayuda, autorizó el ingreso de los militares salvadoreños y ha pedido al Gobierno explicaciones de por qué no solicitó el permiso legislativo.
Afectaciones en el resto de Centroamérica
En Guatemala se inundó el centro del poblado de Melchor de Mencos, en el norte del país, fronterizo con Belice, informó la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres.
Personal de la Cruz Roja de Costa Rica rescata a personas afectadas por las fuertes lluvias que causaron inundaciones en Puntarenas, Costa Rica, el 15 de noviembre de 2024 © Handout / Costa Rica’s Red Cross/AFP
Las lluvias que genera la tormenta tropical Sara «provocan colapso de fuentes pluviales» algunas viviendas han sido inundadas por lo que hay personas albergadas por vecinos y familiares, según protección civil.
En Nicaragua, el gobierno declaró en «alerta amarilla en todo el territorio». El mal tiempo ha provocado el aumento del caudal de ríos.
Panamá se recuperaba este viernes de fuertes lluvias de la temporada previas a Sara, que dejaron al menos 11 muertos y 100 millones de dólares en pérdidas por inundaciones y el colapso de infraestructuras.
La tormenta afecta en menor medida a El Salvador, pero las autoridades de defensa civil están atentas a un posible aumento de lluvias el fin de semana.
Todos los años, la temporada de lluvias deja decenas y hasta cientos de muertes y cuantiosos daños en la infraestructura en Centroamérica, una de las regiones más vulnerables al cambio climático.