El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, acude al Congreso de la República este lunes entre aplausos para presentar una reforma de ley para que la fiscal general, Consuelo Porras, pueda ser destituida.
«He decidido presentar al Congreso de la República una iniciativa para reformar la ley orgánica del Ministerio Público, la cual abrirá el camino para que la fiscal general rinda cuentas al pueblo de Guatemala y a sus representantes y sea removida de su cargo en el marco de la ley», dijo Arévalo la noche del domingo en un mensaje transmitido en cadena de radio y television.
Arévalo busca destituir a la fiscal porque considera que no cumple con sus funciones y que por el contrario fomenta la impunidad. “El oscuro ciclo de Consuelo Porras debe terminar ya”, señaló el mandatario, quien justificó que su decisión busca evitar que un fiscal abuse impunemente del poder y que el Ministerio Público sea usado como un arma política.
Porras presenta amparo
Horas antes de la cadena nacional de Arévalo, el Ministerio Público informó en su cuenta de X, antes Twitter, que había presentado ante la Corte de Constitucionalidad un recurso de amparo ante las que considera acciones arbitrarias e ilegales del presidente Arévalo.
“Estas acciones ilegitimas y arbitrarias denotan una clara intención de alterar la seguridad democrática del país y una grave amenaza para el estado constitucional de Derecho”, se lee en el comunicado.
El MP pide a la Corte de Constitucionalidad, según el comunicado, que ordene al presidente Arévalo que “se abstenga de adoptar medidas políticas, nacionales e internacionales, y medidas financieras o presupuestarias a través de las cuales pretenda tomar el control del Ministerio Público”.
Las razones de Arévalo
Arévalo ya ha pedido públicamente a Porras la renuncia en varias ocasiones. “Su permanencia en el cargo es una amenaza contra la democracia”, dijo el mandatario este domingo. Sin embargo, Porras ha dicho que no dejará su puesto porque sus acciones solo buscan cumplir la ley.
Porras abrió una investigación por supuestas irregularidades en las elecciones por lo que hubo incertidumbre, hasta el último momento, de que Arévalo asumiera la presidencia. “Su persistencia en el cargo anima a las redes politico-criminales a aferrarse a la cooptación de las instituciones”, agregó el mandatario cuya principal bandera es el combate a la corrupción.
Arévalo también recriminó a Porras porque considera que las denuncias presentadas por su Gobierno contra exfuncionarios están estancadas. “¿Dónde está la investigación por la compra irregular de las vacunas Sputnik?, ¿dónde están los procesos contra narcotraficantes confesos?”, dijo Arévalo en su mensaje.
El Gobierno interpuso, a inicios de abril, una denuncia penal contra Amelia Flores, quien fuera ministra de Salud durante la presidencia de Alejandro Giammattei, por los presuntos delitos de abuso de autoridad, incumplimiento de deberes y malversación de fondos, y por supuestas irregularidades en la compra de vacunas Sputnik, de fabricación rusa, durante la pandemia de covid-19. Tras la denuncia, CNN solicitó comentarios a la exfuncionaria, pero hasta ahora no ha respondido.
Flores dijo en una entrevista a un medio local, a inicios de abril, que en la adquisición de las vacunas solo siguió las indicaciones de la presidencia, que basó la compra en el decreto aprobado por el Congreso de Guatemala que facultaba la negociación de Estado a Estado o directamente con fabricantes.