El Gobierno de Colombia afirmó este martes (28.05.2024) que no está «destruyendo el sistema de salud» tras la petición de la aseguradora Sura de salir del Sistema de Seguridad Social, a lo que agregó que la crisis de la compañía se debe a «fallas estructurales del sistema».
La aseguradora colombiana pidió autorización para salir de manera progresiva del Sistema de Seguridad Social, del cual es uno de los principales operadores como Entidad Prestadora de Salud (EPS), en medio de la controversia por la crisis y la reforma del sector.
«No es cierto que el Gobierno nacional esté destruyendo el sistema de salud. La crisis de las entidades prestadoras de salud es el resultado de problemas estructurales y sistémicos que se han acumulado a lo largo de los años, y no a situaciones coyunturales recientes», indicó la Presidencia de Gustavo Petro en un comunicado.
Las EPS son empresas que hacen de intermediarias entre el Estado y la ciudadanía para la prestación de servicios de salud, por los cuales reciben transferencias de dinero público. Sura anunció este mismo martes la decisión de la compañía, que tiene cerca de cinco millones de personas afiliadas.
«Queremos comunicarles la decisión más difícil que hemos tenido que tomar como compañía: hoy radicamos ante la Superintendencia Nacional de Salud la solicitud de autorización para el retiro de EPS Sura del sistema general de Seguridad Social en Salud en Colombia», manifestó la presidenta del grupo ‘Suramericana’, Juana Francisca Llano.
Al respecto, el Ejecutivo insistió: «No es cierto que el Gobierno no haya garantizado los giros de recursos a la EPS Sura ni a ninguna otra EPS. El Gobierno nacional ha asegurado cada obligación financiera a la EPS. A Sura le giró entre el 1 de enero y el 30 de abril más de 3,5 billones de pesos (unos 910 millones de dólares)».
En el comunicado, el Ejecutivo colombiano también quiso dar un mensaje de tranquilidad a las personas afiliadas a la EPS Sura, asegurando que -mientras se haga el proceso administrativo de solicitud de desmonte progresivo- «todos los pacientes continuarán recibiendo los mismos servicios en las mismas instituciones donde los han recibido hasta ahora».
La solicitud de Sura «requiere un estudio previo», agregó la Presidencia colombiana, y un análisis de su viabilidad para determinar si puede ser aprobada o negada. Para el Gobierno, «la situación de la EPS Sura, al igual que la de otras entidades que han tenido que cesar operaciones, demuestra la urgencia de establecer un nuevo sistema de atención en salud en Colombia».
La Superintendencia Nacional de Salud y las EPS
Desde que comenzó el 2024, la Superintendencia Nacional de Salud ha intervenido varias EPS, entre ellas Sanitas, que tiene 5,8 millones de personas afiliadas, y Nueva EPS, la mayor empresa del sector en el país, que tiene 10,9 millones de afiliaciones.
Además, la caja de compensación familiar Compensar, con más de dos millones de personas usuarias, pidió a la Superintendencia la aprobación para retirar de manera «voluntaria» del Sistema de Seguridad Social su programa de EPS.
En este contexto, Sura alegó en un comunicado que «la situación del sistema de salud en Colombia es un problema histórico y estructural» en el que «la cobertura y los servicios ilimitados contrastan con un presupuesto insuficiente» lo que no le permite cumplir «con el indicador del patrimonio adecuado, dado que se agotó».