Jenniffer González Colón fue juramentada este jueves como la nueva gobernadora de Puerto Rico en una ceremonia frente al Capitolio que, aunque tradicionalmente festiva, estuvo marcada por el malestar generado por un reciente apagón que afectó a gran parte de la isla. La primera mujer en ocupar el cargo desde Sila Calderón (2001-2005) prometió encabezar un gobierno que trabaje por la igualdad, la reconstrucción y las oportunidades para todos los puertorriqueños.
La ceremonia de juramentación, que se realizó al aire libre con el mar Caribe como telón de fondo, estuvo acompañada de una “fiesta de pueblo” en la Plaza del Quinto Centenario en el Viejo San Juan. Allí, cientos de personas celebraron el inicio de un nuevo mandato con presentaciones de artistas como Natti Natasha, Manny Manuel y Alberto Stylee. Sin embargo, el ambiente festivo no logró disminuir la preocupación generalizada por el estado de la red eléctrica de la isla, un problema que González colocó al centro de su agenda.
En su primer discurso como gobernadora, Jenniffer González subrayó los retos que enfrenta Puerto Rico y reafirmó su compromiso con la estadidad, una causa que ha defendido durante toda su carrera política. “La desigualdad que vive el pueblo de Puerto Rico la combatiré con toda mi fuerza”, declaró ante un público que incluía legisladores, miembros de su gabinete y simpatizantes.
La gobernadora de Puerto Rico, Jenniffer González (i), saluda acompañada por su cónyuge José Jovin este jueves, en San Juan (Puerto Rico). EFE/ Thais Llorca
“ La estadidad significa igualdad, y yo quiero que tengamos ese acceso a oportunidades”, agregó, aludiendo a los resultados de la consulta no vinculante realizada durante las elecciones del pasado 5 de noviembre, donde el 56.87% de los votantes apoyó la anexión de Puerto Rico como un estado de pleno derecho de Estados Unidos. González también prometió trabajar para que el Congreso estadounidense apruebe un referéndum vinculante que permita a los puertorriqueños decidir el estatus político de la isla.
Además de la estadidad, la gobernadora destacó otras prioridades de su administración. Entre estas se encuentra la mejora de la infraestructura, especialmente la red eléctrica, así como los sistemas de salud y educación. González anunció su intención de impulsar la educación bilingüe, una medida que, según ella, abrirá más puertas para los jóvenes puertorriqueños. “Vamos a tener un gobierno que los escuche, que los atienda y que les resuelva”, afirmó.
Sobre el apagón que golpeó a la isla pocos días antes de su juramentación, González reconoció la urgencia del problema pero evitó profundizar en detalles. “ Voy a trabajar para que haya una red eléctrica que funcione”, señaló, en lo que muchos interpretaron como un reconocimiento de los límites inmediatos de su administración frente a una crisis de larga data.
EFE/ Thais Llorca
Un legado de lucha y una transición marcada por tensiones
González Colón llega a la gobernación en circunstancias complejas. Nacida en San Juan en 1976, es miembro del Partido Nuevo Progresista (PNP) y del Partido Republicano de Puerto Rico. Su trayectoria política comenzó a temprana edad, cuando fue elegida como representante por acumulación en la Cámara de Representantes de Puerto Rico. En 2009, hizo historia al convertirse en la presidenta más joven de la Cámara con apenas 32 años.
Tras ser reelegida en 2012, ocupó el cargo de portavoz del PNP hasta 2017. Durante ese período, también se consolidó como una figura clave dentro del Partido Republicano de Puerto Rico, llegando a ser su presidenta en 2015. En 2016, González alcanzó un hito importante al convertirse en la primera mujer y la persona más joven en ser elegida comisionada residente, el puesto que representa los intereses de Puerto Rico en el Congreso de EE. UU.
Durante su tiempo como comisionada residente, González enfocó sus esfuerzos en promover la estadidad y asegurar recursos federales para la reconstrucción de la isla tras el huracán María en 2017. Sus iniciativas incluyeron proyectos de ley relacionados con veteranos, salud y alivio fiscal para Puerto Rico. En junio pasado, venció al gobernador saliente Pedro Pierluisi en las primarias del PNP, lo que marcó el inicio de una intensa campaña contra su principal oponente en las elecciones generales, Juan Dalmau de Alianza de País.
Las elecciones de noviembre, en las que González obtuvo el 41% de los votos frente al 32.34% de Dalmau, también incluyeron una consulta no vinculante sobre el estatus político de la isla. Aunque la estadidad recibió un apoyo mayoritario, el alto número de votos en blanco reflejó el escepticismo de parte del electorado ante un proceso que muchos consideran simbólico debido a la falta de respaldo en el Congreso estadounidense para un referéndum vinculante.
González Colón asume la gobernación en un momento en que Puerto Rico enfrenta una serie de retos apremiantes, desde la crisis energética hasta la necesidad de reconstrucción tras desastres naturales. Su administración también estará bajo el escrutinio de un electorado dividido y un Congreso estadounidense que históricamente ha mostrado reticencia a cambiar el estatus político de la isla.
En su discurso de toma de posesión, González hizo un llamado a la unidad y reiteró su compromiso de gobernar para todos los puertorriqueños, independientemente de sus afiliaciones políticas. “Yo no voy a gobernar solamente para los que votaron por mí, yo voy a ser la gobernadora de todos los puertorriqueños”, afirmó.