Al menos 60 personas resultaron heridas el viernes al chocar un tren de pasajeros con otro que estaba vacío en Buenos Aires, 30 de las cuales fueron ingresadas a hospitales con distintas lesiones.
La empresa Trenes Argentinos informó en su cuenta de X, antes Twitter, que la Línea San Martín está interrumpida por el choque. La colisión se produjo sobre un puente en el barrio capitalino de Palermo ocasionando el descarrilamiento de la unidad que transportaba a los pasajeros.
La empresa señaló que el tren “colisionó con una locomotora y un coche furgón vacío, a las 10.31 (1331 GMT)”.
Alberto Crescenti, director del Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME), dijo a periodistas que no hay víctimas fatales ni personas atrapadas en los vagones. Señaló que en total fueron asistidas 90 personas y que 30 de los heridos, trasladados a hospitales, son considerados “código rojo”, dos de ellos con traumatismos de cráneo.
El SAME desplegó un gran operativo en la zona, tal como se apreció en imágenes transmitidas por canales de televisión, tras lo cual informó que comenzó a trasladar a decenas de heridos a los hospitales.
Jorge Macri, alcalde de la ciudad de Buenos Aires, se presentó en las cercanías del lugar donde se produjo el hecho y acotó que “de la mecánica del accidente no hay información suficiente”.
Según dijeron a medios de prensa pasajeros que salieron por sus propios medios de la formación accidentada, esta última se detuvo unos minutos y, tras arrancar, terminó impactando contra la otra que estaba adelante sobre la misma vía ferroviaria.
La formación con pasajeros se trasladaba desde Buenos Aires a suburbios al norte de la capital.
Los médicos del SAME atendieron a distintas personas que permanecieron tendidas sobre el suelo y las vías ferroviarias, mientras los bomberos se afanaron por sacar a los heridos que estaban atrapados en los vagones.
En Argentina se han producido distintos accidentes ferroviarios. Uno de los más graves tuvo lugar el 22 de febrero de 2012, cuando un tren lleno de pasajeros que provenía de los suburbios de Buenos Aires ingresó a la estación capitalina de Once y chocó contra el paragolpes del andén, causando 51 muertos.