El Gobierno de Colombia ha pactado una prórroga de seis meses del alto el fuego con las facciones de la disidencia del Estado Mayor Central (EMC) de las FARC que lideran, entre otros, Alexánder Mendoza, alias ‘Calarcá’, en vísperas del inicio a partir de este viernes del sexto ciclo de negociaciones que comenzará en Bogotá.
«La prórroga del cese al fuego bilateral y temporal con respeto a la población civil busca, en el marco del proceso de paz, fortalecer y mantener las reglas y compromisos en materia de protección a la población civil», señala el decreto firmado este miércoles por el presidente colombiano, Gustavo Petro.
El alto el fuego solo se aplicará a los bloques que están sentados en la mesa de negociación, no así la disidencia, por ejemplo, de Néstor Vera Fernández, alias ‘Iván Mordisco’, contra quien el Ejército ha emprendido esta semana una operación para recuperar el cañón del Micay, uno de sus principales bastiones.
Así, no habrá hostilidades hasta el 15 de abril de 2025 contra los bloques Jorge Suárez Briceño, Magdalena Medio Gentil Duarte y el frente Raúl Reyes, comandados, entre otros por Eduardo García Téllez, alias ‘Andrey’, y Yeison Alexis Ojeda, también conocido como ‘Danilo Alvizú’.
Las delegaciones del Gobierno y de la guerrilla estarán reunidas hasta el próximo 19 de octubre y además de evaluar el alto el fuego, también abordarán cuestiones ambientales propuestas durante los encuentros realizados con diferentes comunidades por todo el país.
Mientras tanto, las operaciones contra la disidencia de ‘Mordisco’, que opera principalmente en los departamentos de Valle, Cauca y Nariño, continuarán.
El Gobierno de Colombia mantiene numerosos procesos de paz abiertos que se encuentran en diferentes fases. Al de la escisión del EMC se le suman también los acercamientos con la otra disidencia de la Segunda Marquetalia, y las congeladas negociaciones con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).