Centenares de camioneros colombianos bloquean parcialmente cinco de las principales carreteras del país este lunes para protestar por el incremento en los precios de los combustibles, principalmente el diésel, que comenzó a regir el sábado pasado.
Las manifestaciones, en las que participan transportadores de carga y camioneros, de momento son pacíficas y ralentizan el paso de vehículos en los departamentos de Norte de Santander y Santander con la costa Caribe, el Magdalena Medio, Bogotá y el centro del país.
El pasado 20 de agosto, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, aseguró que «hay una inflación imaginaria que solo se puede resolver con el mundo real».
En ese contexto informó que el precio del diésel subirá 6.000 pesos (unos 1,44 dólares de hoy) entre este año y el próximo, que se hará en tres alzas semestrales de 2.000 pesos (0,48 dólares) cada una.
Con el incremento, el precio del galón del diésel quedó, en promedio, en 11.360 pesos (unos 2,73 dólares de hoy) y, según el Gobierno, si se considerara la inflación desde el 1 de enero de 2020, época en la que se congeló el costo de este combustible, hasta hoy debería tener un valor de alrededor de 13.200 pesos (unos 3,18 dólares de hoy).
Edgardo Rodríguez, propietario de un volquete que transporta materiales de construcción para obras en Bogotá, dijo a EFE que los conductores que están en una de las salidas de Bogotá lo que buscan es que el Gobierno derogue el decreto de las alzas de los combustibles.
«Es una marcha pacífica que se está haciendo para intentar derogar el decreto de incremento del ACPM (diésel)», dijo y explicó que lo que supuestamente había informado el Gobierno nacional era que ese incremento era para los «grandes consumidores».
Igualmente dijo que estaban esperando a que el Gobierno llame a los pequeños transportistas y propietarios para concertar los incrementos y la forma en que se aplicarán y que eso no solo lo hagan con las grandes empresas.
De acuerdo con medios locales, los principales bloqueos de los camioneros ocurren en las carreteras Pamplona (Norte de Santander)-Bucaramanga, a la altura de La Laguna; El Socorro-Oiba, San Gil-Bucaramanga, sector El Guasca; Bucaramanga-Rionegro y Bucaramanga-La Lizama-Barrancabermeja, todas en Santander.
Las terminales de transporte por carretera han expresado su preocupación porque debido a los bloqueos no pueden despachar los autobuses interdepartamentales y tampoco los camiones que llevan carga.
Los comerciantes alertaron que de mantenerse los bloqueos, los precios de los alimentos pueden incrementarse debido a que los productos no llegan a los centros mayoristas, que tienen existencias solo para unos días.
Ante la situación, la Gobernación de Santander puso en marcha un PMU para estar al tanto de los bloqueos en el departamento y ayudar en las negociaciones con los transportadores.
Además, otros camioneros dijeron a medios locales que harán bloqueos en otros lugares de Santander para no permitir el transporte de carga entre el centro y norte del país.
En medio de estas protestas, el presidente colombiano, Gustavo Petro, dijo que las tarifas de diésel deben subir pues es necesario para alcanzar la paridad internacional del precio del combustible, similar a las alzas graduales implementadas en la gasolina.
De acuerdo con el jefe de Estado, mantener el precio del diésel congelado genera una deuda que afecta a los más pobres.