Fuerzas del ejército y la policía despejaron este lunes (04.11.2024) una importante carretera en Santa Cruz, el departamento más rico de Bolivia, que había sido tomada por partidarios del expresidente Evo Morales, investigado por presunto abuso a una menor en 2015.
Con piedras, troncos y escombros, los evistas mantenían en Mairana uno de los más importantes puntos de bloqueo desde que se iniciaron las protestas hace 22 días.
«Mairana acaba de ser liberada por un operativo conjunto de las fuerzas del orden», anunció el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo. «Tenemos al menos 10 personas detenidas», agregó en su página de Facebook.
Desalojo dejó 17 detenidos en Mairana
Al menos 17 personas fueron detenidas en el operativo de Mairana, incluido el concejal evista Gilbert Tapia, informó el diario local El Deber.
Todos los aprehendidos «están siendo trasladados desde la capital cruceña a la ciudad de La Paz para ser puestos ante un juez cautelar, quien definirá su situación jurídica», agregó el diario.
Los efectivos ingresaron el lunes sin dificultades al pequeño centro poblado, que se encuentra en medio de la ruta utilizada por las empresas agroindustriales cruceñas para llevar sus productos hacia La Paz y los puertos del océano Pacífico.
Luego del desalojo de los manifestantes, ingresó maquinaria pesada para remover los obstáculos que impedían el tránsito vehicular.
Manifestantes lanzan dinamita en desalojo en Cochabamba
Los medios locales también reportaron este lunes intensos enfrentamientos entre la Policía y bloqueadores en Capinota, departamento de Cochabamba, sobre la carretera hacia el occidente del país.
«Los bloqueadores, simpatizantes de Evo Morales, utilizaron dinamitas y piedras desde las serranías para resistir la intervención policial, mientras que las fuerzas del orden respondieron con gases lacrimógenos para despejar la vía, que lleva más de 19 días cerrada”, dijo el medio local Brújula Digital, que reportó tres heridos hasta la noche de este lunes.
La mayoría de los bloqueos, unos 15, se mantienen en Cochabamba, el fortín político de Morales, según la estatal Administradora Boliviana de Carreteras.
Las protestas comenzaron el 14 de octubre por campesinos afines al exmandatario para exigir el «cese de la persecución judicial» en su contra.
El líder cocalero es investigado por los presuntos delitos de «estupro, trata y tráfico de personas». Morales acusa al gobierno de querer «proscribirlo» como candidato para la contienda electoral de 2025.