El presidente de Argentina, Javier Milei, vetó la ley de financiamiento universitario por considerar que no “contempla el impacto fiscal de la medida ni tampoco determina la fuente de su financiamiento”, según el decreto publicado este miércoles por la Presidencia de Argentina. La decisión del Ejecutivo fue tomada luego de la protesta multitudinaria en apoyo a la iniciativa aprobada por ambas Cámaras del Congreso.
La ley, que regresará al Congreso tras este veto, busca declarar la emergencia presupuestaria del sistema universitario nacional en el ejercicio presupuestario 2024 en contexto del aumento de los costos de bienes y servicios esenciales en el país donde más de la mitad de la población vive en condiciones de vulnerabilidad económica, según datos oficiales.
“El inconveniente surge de que al tener los mismos gastos de funcionamiento que se tuvo en 2023, los precios de 2024 no dan tregua”, según se expuso en el documento emitido por el Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina, cuando se aprobó la ley.
La decisión del veto fue defendida en reiteradas ocasiones por Milei y ratificada en un comunicado el miércoles, en medio de la movilización al Congreso convocada por estudiantes, gremios docentes, no docentes y movimientos sociales en apoyo a la ley. El presidente dijo que el proyecto era irresponsable y aseguró que su Gobierno está comprometido con las universidades, pero también con el esfuerzo de recuperar la prosperidad económica. Agregó que el lugar adecuado para discutir el financiamiento es el debate del Presupuesto Nacional 2025.
Entre los reclamos de los asistentes a la manifestación estuvieron el aumento salarial para los docentes y el financiamiento a nivel nacional. “Es insostenible este Gobierno, no tiene la mirada hacia nosotros, hacia la universidad, hacia la educación, hacia el progreso de nuestro país”, dijo uno de los manifestantes este miércoles a CNN.