Los trabajadores de la industria eléctrica de Georgia se están desplazando hacia la costa de Texas para ayudar a restablecer el suministro eléctrico a los afectados por el huracán Beryl, como parte de un acuerdo de ayuda mutua entre ambos estados.
«Tenemos estos acuerdos con otras compañías eléctricas, y cuando necesitamos apoyo, ellos vienen a ayudarnos», explicó Marie Bertot, portavoz de Georgia Power.
Texas necesita urgentemente esta ayuda, ya que al menos cuatro personas han fallecido y millones se encuentran sin electricidad.
«Están lidiando con postes rotos y cables caídos. Primero deben limpiar la vegetación antes de comenzar», señaló Bertot.
El lunes por la noche, al menos 20 camiones fueron enviados desde las instalaciones de Union City. Georgia Power no es la única en brindar apoyo; la Cruz Roja Americana de Georgia también ha enviado a 13 voluntarios.
«Tenemos voluntarios en diferentes capacidades, algunos ayudan con refugios y otros con la alimentación», mencionó Adelaide Kirk, oficial regional de desastres.
Los clientes de Georgia no deben preocuparse. Bertot aseguró que hay suficiente personal para manejar las consecuencias de la tormenta en el área metropolitana de Atlanta y asistir a los texanos al mismo tiempo.
«Nuestras cuadrillas están asignadas y trabajando las 24 horas del día», afirmó Bertot.
A pesar de los riesgos, los trabajadores de líneas eléctricas encuentran gratificante ayudar a la comunidad.
«Es muy reconfortante para ellos cuando ven que todo está iluminado y la gente les agradece», concluyó Bertot.