Si has notado pianos coloridos en áreas públicas de Atlanta, no es coincidencia. Malek Jandali, fundador de la organización sin fines de lucro Pianos for Peace, está detrás de esta iniciativa que coloca pianos decorados en diversos lugares de la ciudad. Estos pianos son pintados y decorados en las escuelas y luego son trasladados a espacios públicos, oficinas y otras escuelas para ser disfrutados por todos.
El objetivo de Jandali es conectar a las personas a través de la música y el arte. Cree que colocar pianos llamativos en áreas transitadas puede tener un impacto transformador en las comunidades. Según él, los pianos tienen la capacidad de unir a la gente y fomentar la creatividad en espacios donde no suelen tener acceso a estos instrumentos.
El uso del piano en este proyecto tiene un significado especial para Jandali, quien ha tocado este instrumento toda su vida. Menciona que los pianos suelen ser inaccesibles y que la mayoría de las veces no se pueden tocar en escenarios. Por eso, llevarlos a las calles permite a todos participar y conectarse a través de la música.
En una reciente entrega de pianos en la Academia Atlanta en Roswell, los estudiantes se mostraron entusiasmados con la llegada de dos pianos marrones. Algunos incluso demostraron su talento tocando melodías frente a sus compañeros, destacando lo mucho que disfrutan del sonido y la versatilidad del piano en comparación con otros instrumentos.
El proyecto también busca involucrar a la comunidad en la decoración de los pianos, según la maestra Stephanie Shore. Los estudiantes se encargarán de diseñarlos, fomentando el amor por las artes y extendiéndolo a la comunidad. Este esfuerzo no solo promueve la creatividad, sino también valores humanitarios y de unión.
