Georgia lanzará dos programas piloto de eficiencia energética financiados con 220 millones de dólares de la Ley de Reducción de la Inflación. El objetivo es reducir tanto las facturas de electricidad como las emisiones de gases de efecto invernadero en viviendas con alto consumo energético, especialmente en residencias antiguas que requieren mayor climatización.
El primer programa ofrece descuentos para mejoras en los hogares, como mejor aislamiento y protección contra el mal tiempo. Estos descuentos variarán según el ahorro energético logrado, lo que beneficiará a los residentes de bajos ingresos.
El segundo programa proporciona reembolsos por la adquisición de electrodomésticos eficientes, como estufas eléctricas y bombas de calor, que ayudan a reducir el consumo y las emisiones. Ambas iniciativas permitirán que los hogares reduzcan sus costos energéticos mientras se cuida el medio ambiente.
Además, Georgia implementará un programa de capacitación para contratistas, con el fin de garantizar que haya suficiente personal capacitado para realizar estas mejoras. Ambos programas esperan un lanzamiento completo a principios de 2025.